La juez del Juzgado de lo Penal 1 de Eivissa condenó ayer a 6 meses de prisión, multa de 540 euros y a pagar una indemnización 1.240 euros a un hombre acusado de un delito de allanamiento de morada y lesiones.

El acusado es un alemán, J.K., de 70 años de edad, que alquilaba habitaciones en un almacén del polígono industrial de Can Bernat. A parte de la condena de prisión, que no llegará a cumplir porque carece de antecedentes penales, la juez dictó una orden de alejamiento de 100 metros de la víctima o de cualquier lugar frecuentado por la misma y prohibición de cualquier comunicación durante seis meses y un día.

Los hechos sucedieron el 29 de agosto de 2010 cuando J.K. acudió a la habitación que había alquilado en el polígono de Can Bernat, rompió la puerta de la habitación mientras su inquilino estaba durmiendo y le pegó con un rastrillo y luego le propinó un puñetazo que provocó una fractura en la nariz.

Según parece, tenían problemas entre ambos, aunque no se ha podido llegar a saber cual ya que el juicio no ha llegado a celebrarse. Las acusaciones (pública y particular) han llegado a un acuerdo con la defensa.

En un principio a J.K se le acusó, a parte del delito de allanamiento de morada, a un delito de lesiones con instrumento peligroso, pero el parte médico del agredido sólo presentó la rotura nasal provocada por un puñetazo y por ello se retiró la acusación de ‘instrumento peligroso’. Además el tribunal decidió aplicar el atenuante de dilación, ya que el proceso quedó paralizado durante tiempo y ello ha atenuado en un grado la pena, también la edad del acusado ha sido un factor a tener en cuenta. Es por ello que el fiscal, que en un principio pedía cuatro años de prisión, decidió ayer aceptar la condena de 6 meses de prisión para el acusado.