Un instructor de expedientes disciplinarios en materia de Policía Local, designado por la Conselleria balear d’Interior a petición del Ayuntamiento de Sant Antoni, ha suspendido de empleo y sueldo a dos agentes locales de este municipio que, presuntamente, crearon una empresa de servicios y seguridad. «Se trata de una actividad totalmente incompatible para cualquier agente de la autoridad», explicaron ayer fuentes municipales de Sant Antoni.

Uno de los agentes ha sido suspendido de empleo y sueldo por un periodo de tres meses y el otro por tres años. La diferencia se debe a que el primero de los agentes ya se encuentra suspendido de forma cautelar por un asunto que se encuentra sub júdice y, consecuentemente, se encuentra fuera de servicio.

El otro agente, explicaron las fuentes municipales, ha recibido una sanción mucho más dura porque, supuestamente, cuando creó la empresa de servicios y seguridad era miembro en activo de la plantilla de la Policía Local de Sant Antoni. Uno de estos agentes es quien presentó hace unas semanas una denuncia en la Fiscalía contra el jefe de la Policía Local de Sant Antoni, Javier Verdugo, por el por el presunto pago de unas horas extras que no se realizaban.

Sin embargo, desde Fiscalía señalaron el pasado 25 de marzo que no se aprecian indicios de delito en el pago de estas horas extras.

Explicaciones

De hecho, las explicaciones de Verdugo respecto a este tema coinciden con las del Ayuntamiento y con las declaraciones de seis agentes, en las que defendían que el pago que se les estaba realizando correspondía a una deuda pendiente del Consistorio. Ayer, el Ayuntamiento de Sant Antoni estaba intentando localizar a estos dos agentes para comunicarles la decisión en estos dos expedientes disciplinarios.