Las puertas del hotel Dharma permanecían ayer cerradas «por motivos personales». En la piscina todavía se veían unas colchonetas y unos globos de la pequeña, así como restos del material utilizado por los sanitarios. | Paco S. Pérez

Cerrado por motivos personales. Es el cartel improvisado en una hoja de libreta que podían leer ayer todos aquellos que se acercaban hasta la entrada principal del hotel Dharma, el establecimiento situado en Port des Torrent, en Sant Josep de sa Talaia.

En el suelo, otro folio indicaba «no limpiar la piscina». En su interior, tres colchonetas y diversos globos hinchados, los restos de una velada que acabó de manera trágica. Eran las 22.30 horas del miércoles cuando una llamada alertaba la Policía Local del accidente sufrido por una niña de 7 años en la piscina.

La pequeña, de nacionalidad francesa, falleció ahogada apenas una semana después de llegar a Eivissa.

Una vecina del hotel apuntó que, «extrañamente», la noche del miércoles había mucha tranquilidad en el establecimiento. Explicó que lo normal es que «haya música y movimiento de gente». Con la cara desencajada recordó cómo la pequeña vino hace una semana desde Francia para pasar parte del verano con su padre.

Él fue el primero en auxiliar a la niña al verla flotando en la piscina. Después llegaron hasta dos ambulancias del 061, según informó el IB-Salut. Los servicios de urgencias estuvieron intentando reanimar la niña durante una hora, pero sin éxito. También fue necesaria la presencia de un equipo de psicólogos para atender a los familiares.

Otro vecino, Alberto Jaime, apuntó a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que cuando llegó de trabajar, sobre la una, «vi a una policía muy compungida y atendida por otro compañero. Pregunté a los vecinos británicos y ya me dijeron la tragedia de la nena en la piscina». La Policía Judicial de la Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación.