El Tribunal Supremo ha absuelto a dieciséis personas, acusadas de narcotráfico en Ibiza y que habían sido condenadas a 69 años de cárcel por delitos contra la salud pública en mayo de 2014 por la Audiencia Provincial de Palma.

El Supremo ha estimado un recurso de casación interpuesto contra la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia Provincial, informa en una nota de prensa el TSJIB.

En la sentencia se determina que «la ausencia de unos hechos probados susceptibles de ser puestos a cargo de los recurrentes y calificables como constitutivos de delito, que resulta de la sentencia de casación, obliga a dictar una absolutoria» para los condenados.

El 7 de mayo de 2014, la Audiencia de Palma condenó a dieciséis acusados por narcotráfico a penas de entre 3 y 6 años de prisión que sumaban en total 69 años de cárcel, por dedicarse a la venta de cocaína y cannabis en la localidad ibicenca de Sant Antoni de Portmany y en varias provincias españolas, entre 2011 y 2012.

La investigación que dio lugar a este proceso comenzó con la detención por vender y distribuir cocaína en Ibiza de uno de los acusados, de nacionalidad marroquí, declarado en rebeldía, y con las posteriores intervenciones telefónicas que se llevaron a cabo.

Los letrados defensores pidieron durante el juicio la nulidad de las intervenciones telefónicas por vulneración del derecho al secreto de las comunicaciones y a un proceso con todas las garantías, y en consecuencia solicitaron también la nulidad de todas las pruebas derivadas de las citadas conversaciones, pero el Ministerio Fiscal se opuso a esta petición.

En la sentencia, la Sección Primera de la Audiencia, basándose en jurisprudencia del Tribunal Supremo referente a la práctica de intervenciones telefónicas, considera que no se produjo una vulneración real del derecho de los afectados al secreto de sus comunicaciones telefónicas.

La investigación a este grupo organizado comenzó en diciembre de 2011, en relación con el tráfico de drogas en locales de ocio y la introducción y distribución de anabolizantes en Ibiza y luego se extendió a la venta de estupefacientes también en otras ciudades españolas.

La mayoría de los condenados fueron detenidos en Ibiza entre enero y junio de 2012 por delitos contra la salud pública por dedicarse al narcotráfico desde finales de 2011, aunque cinco de los implicados recibían las sustancias estupefacientes de la organización para venderlas Alicante, Toledo, Ciudad Real y Zaragoza.