Las llamas alcanzaron grandes dimensiones en Berango. | Reuters

El incendio forestal declarado este domingo en Berango (Bizkaia) ha quemado unas 120 hectáreas y está en fase de control, aunque muy cerca de un polígono industrial y del cementerio de la localidad, han informado responsables de la Diputación.

Unos cien bomberos y agentes forestales de Bizkaia han trabajado esta noche y siguen luchando contra el fuego, que se declaró sobre las 20.30 de la tarde en la zona y que se extendió rápidamente a causa del fuerte viento hasta Sopela.

El jefe del servicio de montes de la Diputación vizcaína, Carlos Uriagereka, ha explicado este lunes que las condiciones de trabajo han sido duras al ser una zona de monte muy escarpada, pero sobre todo la intensidad del viento, con rachas importantes, dificulta los trabajos.

Esta mañana se ha relevado al personal, de manera que siguen unas cien personas luchando contra el amplio fuego. Según Uriagereka, el incendio está en «fase de control».

Tras obligar anoche a desalojar anoche varias viviendas en Sopela, aunque sus ocupantes han podido volver a sus casas, el foco más importante del incendio se sitúa ahora en Berango, aunque en esta localidad no ha habido desalojos de viviendas. Tampoco ningún bombero de los cien que trabajan ha sufrido daños.

Está cortada la carretera de acceso a estas dos poblaciones vizcaínas por el monte Umbe, una zona muy afectada por el incendio, que sobre todo ha quemado árboles y monte bajo.

El metro de Bilbao también ha sufrido algunos retrasos esta mañana entre Leioa y Larrabasterra, debido a que el fuego ha provocado la caída de algunas torres de alta tensión, lo que ha afectado al suministro eléctrico. Los problemas se han solucionado y el metro funciona con normalidad.

La Diputación ha contactado con el Ministerio de Medio Ambiente por si fuera necesario el uso de aviones para luchar contra el incendio, pero de momento siguen luchando solo con medios terrestres, y Uriagereka ha comentado que creen que con los medios propios que tienen podrán controlarlo y extinguirlo, aunque se tardará muchas horas debido al fuerte viento.

La llegada de medios aéreos dependería además de la disponibilidad de aviones, ya que otras comunidades próximas como Cantabria y Asturias están afectadas por unos ochenta y sesenta fuegos activos, respectivamente.