En el operativo se incautó de más de una tonelada y media de hachís, dinero en efectivo, armas de fuego, ordenadores, teléfonos móviles y abundante documentación que podría elevar las 29 detenciones realizadas hasta ahora.

Un operativo de la Guardia Civil ha desarticulado una peligrosa organización criminal internacional con conexiones en Eivissa, donde ha sido detenido una de las personas que se encargaba de «mover la droga en la isla», señalaron fuentes de la investigación.

La denominada operación Spax se ha saldado con la detención de 29 personas y la intervención de más de una tonelada y media de hachís, dinero, vehículos, ordenadores, teléfonos y abundante documentación muy valiosa para conocer el entramado y las diversas actividades criminales de esta organización, que también contaba con tecnología para falsificar visados e introducir inmigrantes en Europa.

Las policías de Alemania, Francia, Holanda y Bélgica han colaborado con la Guardia Civil en este importante golpe policial contra el tráfico de drogas y personas.

Fuentes del Instituto Armado apuntaron que en Eivissa se practicó un registro domiciliario y se detuvo a un hombre de nacionalidad marroquí. «El detenido era una de las personas que la organización tenía como enlace y punto de venta de drogas por todo el territorio nacional».

La droga procedía de Melilla y era trasladada en dobles fondos de vehículos hasta Francia, Bélgica, Holanda y Alemania, países donde triplicaba su precio. La «guardería» de la misma radicaba en Málaga y los dobles fondos de los vehículos se realizaban en Madrid, informó la Guardia Civil.

La operación se inició mediante el análisis de información compartida con la Policía alemana sobre frecuentes aprehensiones de droga en dobles fondos de vehículos, cuidadosamente fabricados para impedir su detección.

Las investigaciones permitieron localizar dos pisos en la localidad de Arroyo de la Miel (Málaga) utilizados como guardería de droga, que contaban con fuertes medidas de seguridad y estaban vigilados por dos personas de forma permanente desde su interior, armados con una pistola con munición para evitar el robo por parte de otras organizaciones.

Desde Málaga la droga la distribuían en vehículos vía Madrid y Barcelona, y desde allí a Francia y demás países destinatarios.

En el transcurso de la operación han sido intervenidos 16 vehículos «mula», seis de ellos cargados con droga para distribuir en España.