Agentes de la Policía Nacional han esclarecido la muerte de una mujer de 48 años que desapareció en abril del año 2011 y que murió tras sufrir un golpe en una discusión con su hijo que, posteriormente, la descuartizó. Se da la circunstancia de que el presunto autor de los hechos cumple una condena de más de 20 años por dos tentativas de homicidio a dos tías suyas, cometidas en octubre del 2014.

Según explica la Policía a través de un comunicado, tras diversas indagaciones, los investigadores han llegado a la convicción de que el presunto responsable era uno de los hijos de la mujer desaparecida.

De acuerdo a las pesquisas, el hombre mantuvo una discusión con su madre y en el transcurso de la misma forcejearon y la empujó, golpeándose esta mortalmente contra el suelo. Posteriormente, la descuartizó.

Las investigaciones se iniciaron en agosto del año 2016 al denunciar una mujer la desaparición de su hermana, de la cual no tenía noticias desde abril del 2011. La labor policial se vio dificultada por el hecho de que la desaparición hubiera ocurrido hace más de cinco años.

Los agentes, en un primer momento, descartaron que hubiera huido de manera voluntaria, como parecía haber sucedido por unos mensajes que supuestamente habría enviado desde un número de móvil distinto al suyo y como también opinaban algunos familiares. Además, pudieron comprobar que durante las fechas posteriores a su desaparición habrían desaparecido 45.000 euros de una cuenta de la que era titular.

Los policías centraron las pesquisas en un hijo de la desaparecida, que se encontraba en prisión. Tras solicitar mandamiento al Juzgado para su excarcelación, y gracias a la colaboración de la Sección de Análisis de Conducta, dada su compleja personalidad, el presunto autor de la muerte de su madre confesó ser el autor del crimen.