El Jueves Santo, día 2 de abril. Esta es la fecha que tienen marcada en rojo en su calendario desde hace mucho tiempo los miembros de la Hermandad de los Caballeros Legionarios de Santa Eulària porque será cuando presenten en sociedad su Cristo de la Buena Muerte.

Ese mismo día, la imagen, encargada en un taller de Ciudad Real y que ha costado unos 6.000 euros, aportados por los miembros y simpatizantes de esta hermandad, desfilará por primera vez en procesión por las calles antes de ser bendecida por el obispo de Eivissa y Formentera, Vicente Juan Segura, en la misma puerta de la Capilla de la Virgen de Lourdes, situada en la avenida principal de Santa Eulària.

Según explicó a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA Toni Martínez, presidente de la hermandad y exlegionario, la imagen ha sido construida a tamaño natural y sustituirá a la de la Cruz Desnuda que desfiló el año pasado. «Somos una hermandad de sólo dos años de vida, compuesta principalmente por exlegionarios y simpatizantes de lo que significa servir en este cuerpo del ejército español, y por eso, para nosotros llevar a hombros por las calles de Santa Eulària el cristo que tanto nos apoya y vigila desde el cielo cuando estamos en combate es, ante todo, una cuestión de honor y enorme respeto», confirmó el propio Martínez.

Por ello, durante su procesión del Jueves Santo esta hermandad de los Caballeros Legionarios, que se formó con miembros de la que ya existe en Eivissa, también interpretará El novio de la muerte, considerado popularmente como el himno oficial de este cuerpo tan especial. «Llevaremos la imagen a hombro y a brazo, algo que no es fácil porque el Cristo pesa lo suyo, y desfilaremos con el paso milimétrico que nos enseñaron a hacer en nuestra estancia en el cuerpo y como hemos estado ensayando intensamente martes y domingo desde hace varios meses», aseguró el exlegionario español.

Su nueva casa

Las actividades que tiene prevista la Hermandad de los Caballeros Legionarios de Santa Eulària no terminan con la Semana Santa. Además de haberse hecho su propio escudo, con una curiosa sargantana muy característica, por delante tienen un amplio programa cuyo acto central será el traslado el próximo 5 de abril de la imagen del Cristo de la Buena Muerte a la que será su casa, la iglesia de Puig d’en Valls.

Además, durante dos fines de semana consecutivos, el 12 y 19 de abril, la imagen viajará hasta Formentera donde los legionarios la bajarán a brazo desde el barco a la playa para que luego sea trasladada en procesión hasta Sant Ferrán.

Pero eso será después del Jueves Santo, un día para el que los cerca de 20 miembros de esta hermandad, cinco de ellos mujeres, siguen ensayando intensamente. Y mientras llega la cita, Toni Martínez aseguró a este periódico que siguen abiertos a cualquier interesado en unirse a ellos. «Esperamos con los brazos abiertos a todos los que quieran venir, hayan sido o no legionarios, tanto hombres como mujeres, porque pretendemos aglutinar al mayor número posible de simpatizantes de la legión y el Cristo de la Buena Muerte», concluyó.