Las dueñas de este puesto miman con todo lujo de detalles la decoración de sus productos. Foto: D.M.

Como todo tesoro que se precie, la pescadería Su&Lu puede resultar difícil de localizar dentro del laberíntico universo del Mercat Nou de Vila.

Unas pocas pistas pueden bastar para identificarla: mucho colorido, una cuidada y espectacular decoración y, sobretodo, pescados de alta cuna que advierten que no nos encontramos en un establecimiento ‘de barrio’.

Salmón salvaje (65 euros/Kg), ostras Gillardeau (2,50 euros/unidad), rodaballo salvaje (24 euros/Kg), algas variadas (a 24 euros/Kg), solomillo de atún (39 euros/Kg) y enormes cigalas de Algeciras (55 euros/Kg) son algunas de las perlas que brillan en su escaparate y hacen salivar al transeúnte. Según la disponibilidad, también venden lubina salvaje o incluso caviar iraní.

Con esta tarjeta de presentación, a nadie le extraña que entre sus clientes se encuentren personajes VIP de talla mundial como Leonardo di Caprio, Naomi Campbell, Paul McCartney, Orlando Bloom, Sylvester Stallone o Flavio Briatore. Su cuenta de Facebook lo atestigua gráficamente en algunos casos.

En el ámbito nacional, también han atendido -en persona o mediante alguno de sus empleados- a factótums como Florentino Pérez, a personajes célebres como Samantha Colate Nájera -jueza de Master Chef- o figuras de la cocina como Karlos Arguiñano.

Sobre este último, Lorena Campanario -gerente del puesto junto a Susana Calle- muestra con orgullo una fotografía del popular chef vasco en una visita hace dos años:«Dijo que era una de las pescaderías más bonitas y espectaculares que había visto en la vida», recuerda.

Sobre el presidente de ACS y el Real Madrid, indican que fue una empleada doméstica la que se desplazó hasta la pescadería, pero que esta volvió para decirles que el empresario madrileño «le felicitó por el excelente solomillo de atún que le había cocinado».

Evidentemente, Su&Lu no es una pescadería ‘al uso’. Su peculiar producto se dirige a un público sibarita que abunda en plena temporada turística y que desaparece pasado el verano: «En invierno cerramos cuatro o cinco meses. Funcionamos sirviendo a yates», comenta Calle.

Este establecimiento abrió en 2011, cuando sus dos socias vieron el hueco que podían cubrir en este reducido pero pudiente target: «Llevamos más de 15 años en el sector y teníamos claro que queríamos montar algo muy especial, ofreciendo pescado que no puedas encontrar en otros sitios», explica Calle.

Pero también tienen un espacio para todos los bolsillos. Entre las delicatessen antes descritas, también encontramos en su puesto productos asequibles a precios razonables: morralla variada (6,90 euros/Kg), sepia (14 euros/Kg) o rape (21,90 euros/Kg).

Sin llegar al bullicio, ayer el puesto recibió bastantes visitas. Un cliente -Davide Rocco- se llevó atún fresco picado (32,90 euros/Kg): «Le añado limón, dos hojas de menta y ya tengo el entrante», detalló.

Por su parte, otra clienta, Karen Karl, una ciudadana alemana afincada en Eivissa desde hace 16 años, declaraba que solo consume pescado azul: «Así, sé seguro que no viene de piscifactoría. Aquí compro salmón, boquerones, sardinas o caballa. Si puedes, tienes que probar el salmón salvaje», afirma.