Los concursantes del grupo de Malú fueron los últimos en cantar y los telespectadores tuvieron que esperar hasta pasadas la 1 de la madrugada para poder disfrutar de la actuación del ibicenco, que en su primer directo se atrevió con Thinking out loud, del cantautor inglés Ed Sheeran. Un tema con el que ganó los votos de la audiencia y los elogios de los coaches.
El talent subió con ganas al escenario, donde demostró que el directo le hace sacar lo mejor de sí mismo. Así lo aseguró su coach al acabar la actuación: «El público hace que le salga algo muy especial de las entrañas», aseguró Malú.
Pero los halagos no se quedaban aquí. Para Antonio Orozco, la del ibicenco fue «una de la mejores actuaciones de la noche», y Alejandro Sanz, que en la noche del miércoles presentó en directo el single Zombie a la interperie, emocionó a Garli con sus palabras: «Llevas todo el soul y el blues dentro de tu voz y eso es muy bello».
El directo
Joaquín Garli fue, de los talents de Malú, el preferido por el público. El ibicenco se midió en directo a la fuerza de Roxy y al ‘quejío’ flamenco de Juañarito.
Después de conocer que era el preferido por el público, Joaquín Garli pudo relajarse al saber que protagonizará una ronda más del talent show, que le puede llevar a ganar el programa.
Junto a Garli, Roxy y Juañarito escuchaban, cogidos de la mano, la decisión de Malú, que finalmente optó por quedarse con Juañarito.
Cada vez son menos los artistas que continúan en la aventura de La Voz. Junto al ibicenco, la audiencia salvó a Antonio José, del grupo de Orozco; a Rai, del equipo de Laura Pausini; y a José Manuel, del de Alejandro Sanz. A su vez, competirán por ganar el programa junto a los concursantes salvados por los coaches, Juañarito, Irene, La Flaka y Raquel.
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