El periodista y poeta Toni Roca (Palma, 1944), lo ha vuelto a hacer. Si en 2013 revolucionó y escandalizó a partes iguales a buena parte de la población ibicenca con su colección de relatos eróticos La figa fràgil, prácticamente tres años después llega dispuesto a subir el listón con la segunda parte, publicada de nuevo por Edicions Aïllades. En esta ocasión se trata de 35 poemas que, según sus palabras, «son para excitarse leyendo en compañía de alguien, tanto hombre como mujer, y tomando un buen gin tonic». Sin embargo, para saber mucho más, habrá que esperar a esta noche, cuando presente a partir de las 20.00 horas la obra en el Hotel Pacha en compañía de la profesora y doctora en Ciencias Sociales y Humanidades, Rosa Rodríguez Branchat.

—Segunda parte de La Figa Fràgil... ¿tendremos trilogía?

—Pues no podría decirle. De momento, como la primera parte fue relativamente bien y aún no había agotado las ideas, me decidí a sacar una continuación. Eso sí, estoy trabajando en una posible tercera parte para que esto sea como la película de El Padrino, la una, la dos y la tres.

—En su primera parte dedicaba el libro a Rouco Varela, «expert en roba interior femenina»... ¿a quién le dedica esta continuación?

—A Mary Poppins. Primero porque deseo un futuro más justo y más humano para todos los que viven en este planeta y después, porque creo que ese aura virginal que siempre desprendió es el contrapunto perfecto para todo lo que intento contar a través de los poemas del libro.

—¿Y qué cuentan sus poemas?

—Pornografía sin tapujos. Nada de erotismo. Llaman a las cosas por su nombre, las pollas son pollas y los coños coños. Eso sí, esta segunda parte es más descarnada y si me apura un poco más amorosa.

—Entonces, ¿es un poemario para obsesos sexuales?

—Es un poemario para todo el mundo que lo quiera leer. Nunca he hecho distinciones en mi vida y no las voy a hacer ahora a estas alturas de mi vida.

—¿Cómo se puede excitar alguien leyendo un poema con todo el contenido pornográfico que nos rodea actualmente?

—A través de la mente. Por ahí pasa todo y si ésta no funciona lo demás no lo hace.

—¿En qué se ha inspirado para escribirlos?

—Pues en mis propias fantasías sexuales. Las tengo y muchas a pesar de que ya he pasado la barrera de los 70 años. Eso sí, he de decir que los poemas que recoge este libro casi me han salido de forma espontánea.

—¿Qué mujeres aparecen en sus fantasías?

—Sin duda Marilyn Monroe y Audrey Hepburn. Eran perfectas y aún hoy me siguen poniendo muchísimo.

—¿Y de las actuales?

—Dos mujeres que forman parte del Partido Popular. Por un lado Soraya Sáenz de Santamaría, que me da mucho morbo y con la que no me importaría casarme, y por otro María Dolores de Cospedal. Tiene un culo tremendo. Me encantaría que fuera mi amante a pesar de que no comulgo con sus ideas políticas.

—¿Podría con ellas?

—Sin duda. Estoy en plena forma. La pregunta es ¿Podrían ellas conmigo?

—Suena a ninfomanía...

—Bueno, en parte todos somos un poco ninfómanos. A todos nos encanta el sexo.

—Volvió a saltar a la actualidad en 2013 con la publicación de la primera parte. Ahora lo vuelve a hacer con la continuación... ¿no tiene miedo de que no le tomen demasiado en serio haciendo este tipo de poesía?

—Realmente me da lo mismo. Ya tengo una edad y hago lo me pide el cuerpo. Lo que opinen los demás no me importa.