La Fundación Abel Matutes ha proporcionado un dispositivo informático para facilitar la comunicación de Víctor, un niño de cuatro años diagnosticado con un Trastorno del Espectro Autista que afecta a su interacción social y a su comunicación. Este trastorno cuenta con una base genética y un sustrato orgánico que alteran la función cerebral y, como consecuencia, el comportamiento de las personas, hecho que dificulta su comunicación. El niño está escolarizado en modalidad de integración y forma parte de un grupo de su misma edad en un aula ordinaria, además, tiene apoyos en función de sus necesidades individuales y de los recursos personales disponibles. Por este motivo, el equipo educativo del centro escolar envió una carta a la Fundación Abel Matutes en la que solicitaba la ayuda y explicaba los problemas a los que se enfrenta y cómo este dispositivo puede cambiar su forma de comunicarse e interactuar.