Los más pequeños pudieron disfrutar a sus anchas de la pasarela hinchable instalada en la piscina. Foto: ARGUIÑE ESCANDÓN

El complejo deportivo de Can Coix se convirtió durante la tarde de ayer en el espacio destinado al juego libre de los más pequeños en la piscina, a la iniciación al rugby-tag para categorías infantiles y, a última hora de la tarde, en el escenario de las sesiones de taichi y chi kung para mayores. Una jornada de puertas abiertas que se celebró por primera vez en el marco de las fiestas patronales de Sant Bartomeu.

Los niños pudieron disfrutar de una pasarela hinchable instalada dentro de la piscina de unos 15 metros de longitud. Además, varios castillos hinchables ubicados en el polideportivo hicieron las delicias de los jóvenes usuarios que también pudieron disfrutar de diferentes materiales de juego. Las actividades estuvieron supervisadas por monitores del Ayuntamiento de Sant Antoni y de las actividades promocionadas, aunque los niños asistieron acompañados de un adulto que acompañó sus juegos en todo momento.

El objetivo de la jornada, según el concejal de Esports de Sant Antoni, Antonio Lorenzo, «que después del lío que hubo con la anterior gestión del complejo todo el mundo entienda que Can Coix es de todo el pueblo y para que la gente lo disfrute. Que ahora que lo gestiona el Ayuntamiento de Sant Antoni, Can Coix es un lugar dinámico que ofrece multitud de actividades a los vecinos de la zona».