La fuerte competencia por precio del pescado capturado fuera de Eivissa ha llevado a las cofradías locales a no aplicar la subida que habitualmente venían aplicando a su género en los meses de julio y agosto. Según iformaron ayer fuentes de Pimeef, tras una reunión entre los pescadores, el Consell y los comerciantes de estos productos agrupados en la pequeña patronal, los primeros han acordado «no subir los precios en estos meses de verano y hacer una propuesta de precios a la baja del pescado fresco ibicenco dependiendo de la temporada».
«De esta manera, las especies que más se capturen podrán tener una mayor salida en el mercado vía bajada de precio, todo ello acompañado de campañas de promoción de consumo de pescado local entre la poblacion y la Asociación de Restaurantes de Pimeef», añaden.
Cambiar la dinámica
En el encuentro de inicios de semana, en el que participó también la directora general de Pesca del Govern, Patricia Arbona, se constató que la crisis y el cambio de hábitos de consumo ha supuesto que se produzca un incremento en el consumo de especies llegadas de otros puertos de la Península (sardina, bacaladilla, atún, boquerón y merluza, entre otros), así como de producto congelado.
«Este problema está haciendo actuar a las dos partes implicadas, pescadores y pescaderos, de una manera que no beneficia el consumo del pescado local ya que los primeros intentan vender sus especies por otros canales y las pescaderías compran el pescado de fuera a precios más bajos y con mayor salida, en detrimento del pescado ibicenco».
Desde la Pimeef, ayer mismo se elaboró una encuesta en el Mercat Nou de Vila para comprobar las tendencias de consumo de pescado fresco en Eivissa. El sondeo contradice aparentemente las apreciaciones de los pescadores al recoger que sólo el 52,5% de los encuestados compra habitualmente pescado de fuera en lugar de producto local. Lo que sí refleja el cuestionario es que el 58,97% opta antes por la calidad que por el precio y que cambiaría de consumir producto exterior a pitiuso opr una cuestión de precio en un 61,55% de los casos.