Y de repente, parece que los mejores looks del verano se rigen por un leit motiv que parece directamente extraído del mar. En una versión renovada y mucho más chic que aquellas pulseras y gargantillas que llevábamos en los veranos de nuestra infancia, ya fueran compradas en algún puesto del paseo marítimo o hechas con las conchas y caracolas recogidas durante un día de playa, las pechinas, en todas sus versiones, se suman a la lista de must haves de este verano.
Como suele ocurrir la gran mayoría de las ocasiones en que una tendencia se convierte en viral, Prada ya adelantó esta nueva moda en su colección Otoño-Invierno 2017/18, mezclando conchas y caracolas con jerséis de lana. Son ya varias las firmas que se decantan por esta tendencia marina creando colecciones de joyería y bisutería que incluyen todo tipo de caracolas, crustáceos y moluscos combinados con otros elementos como el latón, la plata e incluso el oro. Valentino, Isabel Marant o la firma española de complementos, Gimaguas, que comercializa una de las piezas que más ha captado la atención de las fashionistas y todas sus seguidoras: el pendiente coquillage, una propuesta de latón bañado en oro que, por desgracia de muchas, se encuentra agotada desde hace tiempo.
Los diseños desenfadados y bohemios que inspiran esta tendencia han conquistado a medio mundo dejándose ver en los blogs de moda y perfiles de Instagram más famosos del panorama fashion. Las principales entendidas en moda ya se han hecho con esta tendencia y así lo han mostrado en sus RRSS algunas como Gilda Ambrosio o Leandra Medine, dejándonos claro que las caracolas se llevan dentro y fuera de la playa.
Muchas veces olvidamos la importancia de lucir joyas o en su defecto, bisutería. Un gesto tan sencillo como decorar un escote con decenas de collares, una muñeca con infinitas pulseras o unas orejas con unos llamativos pendientes, es capaz de cambiar nuestro estilismo final por completo. Añádelas a cualquiera de tus looks y en cualquier lugar y momento del día. Aportarán estilo y frescura a tu outfit final. Una de las máximas es elegir piezas que, sin perder ese aire bohemio, sigan siendo refinadas.
Los principales portales de moda le pronostican a esta tendencia un éxito igual o incluso superior al de las cestas de mimbre, que ya es mucho. Así que, déjate llevar por un espíritu cien por cien marítimo con collares, pulseras, pendientes y todo tipo de bisutería elaborada con conchas y caracolas.
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