Dos coches patrulla de la Policía Local de Sant Josep tuvieron que perseguir la pasada madrugada al conductor de un turismo, J.M.P.O., que, cuando vio que los agentes habían establecido un control, apagó las luces de su vehículo y cambió de sentido para evitar que le dieran el alto, informaron ayer desde el retén policial. Al apagar las luces y cambiar de sentido, el conductor invadió el carril contrario y se subió a la acera, indicó la policía.
Eran las 3,35 horas de la madrugada y el control estaba en la calle Murtra de Plata den Bossa, cerca de la bolera. Un coche patrulla emprendió la persecución del vehículo, un Citroën C-3 de color oscuro, y después un segundo vehículo policial se sumó al primero.
Durante la persecución, que se realizó con las luces y las sirenas y llegando a sobrepasar los cien kilómetros por hora, según la policía, el conductor se saltó dos semáforos en rojo y acabó dirigiéndose hacia el cruce que forman las calles Fray Luis de León con Falgueras, donde se estrelló contra una señal de stop.
Allí, según el relato policial, se detuvo y salió del coche nervioso, gritando, pidiendo explicaciones e intentando agredir a los agentes, que tuvieron que reducirlo. La policía añadió que durante la persecución hubo peligro para los viandantes.
'Drogo test'
Los agentes cachearon al conductor y le encontraron una papelina con lo que parecía cocaína, señalaron desde el retén. Fue sometido a la prueba de la alcoholemia y dio positivo. Primero 0,48 miligramos de alcohol por litro de aire espirado y después 0,50. Se le aplicó el drogo test y dio positivo en cocaína y cannabis.
Los agentes le llevaron a Can Misses para realizar nuevas pruebas de drogas y finalmente lo entregaron a la Guardia Civil. Se espera que en las próximas horas sea puesto a disposición del juez de guardia.