Bernabé Rodríguez afronta los últimos metros ante la mirada del público.

Bernabé Rodríguez continúa ampliando su currículum de éxitos en la marcha nórdica. El atleta ibicenco sumó ayer su tercer récord oficioso a nivel mundial gracias los dos registros que obtuvo en las 8 millas y 10 kilómetros en pista. La tentativa se llevó a cabo en las instalaciones de Can Misses y, tras completar 22 vueltas, dejó el nuevo récord del mundo en 39'39''58 -las 8 millas- y 49'22'76 -los 10 kilómetros-.
«Ha salido todo muy bien, he triturado el récord. Ha sido muy duro y he sufrido muchísimo, pero se ha hecho. Es una marca estratosférica», explicaba poco después de completar la prueba el veterano corredor. La anterior plusmarca estaba cifrada en 47'03 y en 59'09, respectivamente, por lo que la proeza adquiere proporciones mayúsculas. Bernabé Rodríguez admite que «estaba preocupado por el tiempo» y por no poder contar con un corredor liebre. «He salido solo, jugándomela. En la recta de meta me daba el viento a favor, pero en la contrarecta, de cara. Se movían mucho los bastones; tenía que agarrarme con fuerza y tengo ampollas», relata.
Su particular reto cuenta con el apoyo de quien fuera su entrenador, el presidente del CA Pitiús Toni Roig, pero también de la Asociación Internacional de Nordic Walking (INWA), y el Comité Olímpico. «Es un primer paso la creación de esta federación en Finlandia, pero todavía queda mucho por hacer», comenta Rodríguez, si bien lamenta la falta de oficialidad de sus éxitos deportivos: «Son récords oficiosos porque debería haber jueces que contraran si los corredores levantan o arrastran los bastones, como se hace en la marcha».
La fortaleza y velocidad del atleta le permitieron alcanzar una media de 12 kilómetros por hora sobre las pistas, algo que pretenderá mantener en la primera edición del Campeonato de España de marcha nórdica, donde tratará de ganar. «Posiblemente esté entre los cinco o seis mejroes atletas del mundo en esta especialidad. Hay trabajar con modestia y humildady le dedico el récord a mi mujer, mis hijos y a Toni Roig», admite el marchador ibicenco, que lamenta no contar «con alguna beca o patrocinador para competir en el extranjero».
Después de haber registrado tres récords, Bernabé ya vislumbra en el futuro sus próximas metas: «Me falta la media maratón, el maratón, los 50 kilómetros, y las 6, 12 y 24 horas en ruta».