El Parlament balear aprobó ayer una moción presentada por el Partido Popular, referente a las infraestructuras educativas en Eivissa, con el fin de agilizar los trámites de construcción del instituto de Sant Antoni. La moción también propone mejorarla coordinación entre ayuntamientos y Govern e incrementar los esfuerzos y los recursos para el mantenimiento de los centros escolares. El último punto de la propuesta, la reprobación del conseller d'Educació, Bartomeu Llinàs, no fue apoyado por el resto de grupos parlamentarios.

La diputada popular Carolina Torres criticó la «mala gestión» de la conselleria d'Educació e instó a que se cumplieran los plazos previstos «porque es la única forma de reducir el déficit que tenemos en la isla de Eivissa y tener unas infraestructuras en condiciones». En este sentido, apuntó que las obras del instituto de Sant Antoni se encuentran paralizadas y reclamó que la Conselleria «tome las medidas necesarias para retomar estas obras y se finalicen en los plazos previstos».

En septiembre

La diputada de Eivissa pel Canvi Esperança Marí indicó que hay mucha obras «que sufren retrasos y hay otras, que son muy importantes para la educación en Eivissa, que aún no han empezado». Marí confió en que el nuevo centro de secundaria de Sant Antoni esté en marcha el próximo curso, en septiembre, y precisó «que, al ritmo actual, podríamos pensar que no estará listo y sería lamentable».

Torres, por su parte, también instó a mejorar las relaciones del Govern balear con el Ayuntamiento de Vila, «donde las carencias son más graves y donde hace más de dos décadas que no se ha construido ningún centro educativo». En este sentido, la diputada del PSOE Maria Torres explicó que la comunicación con el consistorio es «diaria y constante» e hizo especial hincapié en los esfuerzos que está realizando la conselleria d'Educació: «¿Se le puede llamar mala gestión a la inversión de 40 millones de euros en esta legislatura frente a los 25 que invirtió el Partido Popular?». Torres recordó todas las quejas suscitadas tanto por las apymas, equipos directivos y sindicados en 2006 por las deficiencias presupuestarias y apuntó: «A veces hay que reprobar menos y ser más honesto y no tener ciertas actitudes planfetarias».

La diputada popular, por su parte, calificó el trabajo de la conselleria «no como la legislatura de las grandes infraestructuras sino de la gran decepción» y agregó que a día de hoy «sólo ha llegado una pequeña parte de esa inversión». «La mala gestión es anunciar inversiones, vender motos que sólo son titulares y no hechos».