Un joven de 17 años de edad de nacionalidad irlandesa fue arrestado ayer en Sant Antoni sobre las siete de la mañana después de que robara una furgoneta destinada al transporte público, propiedad de un establecimiento hotelero, y emprendiera una peripecia por la localidad en la que incluso llegó causar lesiones a una turista y que no paró hasta que los agentes de la Policía Local del municipio lograron detenerlo.

El joven, al no haber cumplido aún los 18 años, ha sido puesto a disposición de la Fiscalía de Menores de Balears, que se hará cargo de la instrucción del caso. Según la Policía Local, está acusado por un delito contra la seguridad vial, conducción temeraria y robo de vehículo a motor.

Robó la furgoneta en un descuido del conductor, que dejó las llaves puestas. Eran las siete menos cuarto de la mañana. El hombre avisó rápidamente a la policía y una patrulla emprendió la persecución de la furgoneta.

A pesar de que los agentes emplearon señales luminosas y acústicas, el joven no se detuvo e intentó cruzar el Passeig de ses Fonts por el carril de servicios. En ese momento chocó contra un pivote de hormigón que, según la policía, lanzó a varios metros.

Positivo en alcohol

El pivote golpeó a una turista, a la que causó heridas leves. Otras patrullas que se encontraban en la zona lograron detener al conductor, que al ser menor de edad carece de carné de conducir. Fue sometido a la prueba de la alcoholemia y dio 0,64.

Según la policía, la rápida intervención de los agentes evitó que se produjeran heridos graves, ya que, al parecer, a esa hora la zona está repleta de turistas.