La construcción de la nueva fachada del edificio, que permitirá la ampliación de los espacios interiores. | Marco Torres

El director del aeropuerto de Eivissa, José Antonio Àlvarez, aseguró ayer que Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) espera ultimar las obras de la terminal en 2013, con la instalación de los cuatro fingers que facilitarán el ascenso y el descenso de los pasajeros a los aviones. «Será la última actuación que se hará en el edificio de la terminal», destacó Àlvarez.

Según el director del aeropuerto, aún quedan dos fases de obras que se sucederán a lo largo de los próximos dos inviernos en el edificio. A partir de entonces, se iniciarán los trabajos del aparcamiento subterráneo que ya tiene el visto del Ministerio de Medio con un informe de impacto ambiental favorable. Àlvarez explicó que el «inicio real» de la construcción de casi 2.000 plazas parking que dotarán a esta infraestructura «estará condicionado» al final de la fachada de la terminal porque «las dos obras estarán una muy cerca de la otra». «Hay que tener en cuenta la calidad para el pasajero», agregó sobre la construcción del aparcamiento, que tendrá una capacidad para 1.923 vehículos frente a los 646 actuales, que se repartirán en dos plantas de 20.200 metros cuadrados cada una. Además se construirá una zona reservada para el estacionamiento de 69 autobuses y 15 microbuses.

El mobiliario

En cuanto al inicio de la renovación del mobiliario de la terminal, que la semana pasada se adjudicó por 2,4 millones de euros, el director explicó que, aunque el expediente se ha puesto en marcha, la instalación de todo el equipamiento dependerá del transcurso de las obras de la terminal. «A medida que vayamos poniendo en servicio los diferentes espacios se irán equipando», detalló.

Por otra parte, cabe recordar que las obras de la terminal se adjudicaron en agosto de 2009 a la Unión Temporal de Empresas (UTE) Dragados/Cobra Instalaciones y Servicios con un presupuesto de 59.371.211 euros y un plazo de ejecución de 32 meses.

Las principales actuaciones son la ampliación del edificio hacia el noroeste para aumentar la capacidad de la sala de llegadas, que dispondrá de nueve hipódromos de recogida de equipaje, así como dos nuevas salas de embarque. Asimismo, la ampliación del edificio hacia el suroeste permitirá ubicar un hall de salidas con 15 nuevos mostradores de facturación, alcanzando así un total de 66 mostradores. El desplazamiento de la fachada sobre el vial de circulación permitirá ganar espacio para la formación de colas en facturación, la ampliación del vestíbulo y de la sala de recogida de equipajes.

La pista de rodadura espera el final de las expropiaciones

Por otra parte, el director del aeropuerto, José Antonio Àlvarez, destacó que la ampliación de la pista de rodadura comenzará una vez finalice el proceso de expropiaciones, cuyos expedientes se empezaron el pasado mes de marzo para la adquisición de los terrenos necesarios a fin para acometer la reforma del aeropuerto, según la primera fase del Plan Director aeroportuario. En concreto, estas obras consisten en ampliar y convertir la actual pista de rodadura en una pista de contingencias para uso en caso de que la principal quede bloqueada.

Cabe recordar que la ocupación afecta a una superficie de 258.270 metros cuadrados distribuidos en treinta y seis parcelas de propiedad privada, que pasarán a formar parte del Sistema General Aeroportuario. Dentro de las expropiaciones figuran fincas agrarias, ocho parcelas construidas, la mayoría de ellas correspondientes a los negocios instalados en la zona. Asimismo sólo se expropiará una vivienda.

Balance «muy positivo» para el transcurso del verano

El director del aeropuerto valoró de forma «muy positiva» el transcurso de verano en cuanto a tráfico de pasajeros, destacando que «por primera vez se superó el millón» de viajeros en un mes. Así se refirió a los datos del pasado agosto, de los cuáles destacó estar «muy satisfecho» con los resultados. En este sentido, cabe recordar que el aeropuerto ibicenco batió un récord en agosto cuando por la terminal transitaron 1.083.518 pasajeros y se realizaron 11.003 movimientos, lo que supuso un incremento del 11 por ciento respecto a agosto de 2009. En datos acumulados de enero a agosto de 2010 pasaron por el aeropuerto 3.707.894 personas, un 9,5 por ciento más que en los primeros ocho meses del año pasado. Asimismo, el director del aeropuerto descartó que haya sido un verano complicado en cuanto al aumento de pasajeros y las obras, e insistió estar «muy contento» con los últimos datos del tráfico aéreo.