La ministra de Defensa, Carme Chacón, atiende a los periodistas a su llegada al desayuno informativo organizado por el Forum Europa.

El Gobierno convocará a todos los grupos parlamentarios para consensuar un protocolo de celebración de la Fiesta Nacional, una iniciativa que ha sorprendido al PP por considerar que podía haberse planteado ya ante casos de «agravio» a la bandera de España ocurridos en algunas comunidades.

Los abucheos y pitidos contra Zapatero durante el desfile del Día de la Hispanidad han recibido la condena de varios miembros del Gobierno, dirigentes políticos y presidentes autonómicos.

Zapatero dijo ayer que las personas que le abuchearon tienen «lógicamente el derecho» a hacerlo, pero «deberían intentar mantener el respeto» en «un acto de todos» como el homenaje a las Fuerzas Armadas.

La ministra de Defensa, Carme Chacón , anunció que el Ejecutivo va a convocar a todos los grupos parlamentarios, tras lamentar que «grupos reventadores» hayan perturbado el desfile.

La propuesta ha sorprendido al líder del PP, Mariano Rajoy , quien asegura que una iniciativa así podía estar ya planteada ante casos de «agravio» a la bandera de España ocurridos en algunas comunidades autónomas.

El presidente del Congreso, José Bono , considera «vergonzoso» que en el homenaje a los caídos se escuchasen abucheos contra el presidente, «da igual quién sea», y ello demuestra la «calidad humana» de quienes se comportan así, quienes les alientan y quienes les justifican.

José Blanco , ministro de Fomento, señala que no es algo nuevo, porque «la derecha y la derecha extrema utilizan cualquier oportunidad para lanzar gritos contra Zapatero». «Les vale todo», se queja.

Gaspar Llamazares , portavoz de IU, opina que «no es plato de gusto convertir una de las fiestas nacionales y las calles de Madrid en el insultódromo».

Para el ex jefe del Ejecutivo Felipe González , los que profieren gritos son los mismos que hace veinte años le insultaban a él, que «no consideran la Fiesta Nacional de los españoles, sino de ellos».

La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre , admite que los abucheos se produjeron en un momento «especialmente inapropiado e inadecuado».

También el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo , apunta que los abucheos en momentos como la celebración de la Fiesta Nacional «sobran» y «son prescindibles».