El conseller de Mobilitat, Albert Prats, indicó que han mantenido contactos con navieras asentadas en otras zonas del Mediterráneo y del Mar del Norte para ver si les podría interesar cubrir las líneas entre Eivissa y la Península y así contribuir a una mayor competencia que provoque un abaratamiento de los precios de los pasajes y del transporte de mercancías.

Según explicó Prats, estas empresas podrían encontrar en Balears un nicho de negocio que les interese. «Ven que podrían aplicar unos precios, según sus costes, que son muy inferiores a los que se están cobrando por parte de las navieras que operan aquí», indicó el conseller, que remarcó que actualmente los precios que tienen las empresas que trabajan en Balears «no responden a los costes que soportan, sino a otras dinámicas». De hecho, el Consell denunció ante la Comisión Nacional de la Competencia (CNC) la existencia de un posible pacto entre navieras que habría provocado un alza en los precios y, en consencuencia, la CNC ya ha abierto un expediente a Baleària y a Acciona Trasmediterránea para investigarlo.

Prats ve la posibilidad de la introducción de una naviera que pudiera entrar en el mercado para competir de «forma fuerte» como algo mucho más factible que la creación de una empresa pública que realice viajes marítimos entre Eivissa y la Península.

«Hemos hablado alguna vez de esta posibilidad, pero hay que observar los precios, porque las navieras podrían hacer una guerra de precios a la baja, el llamado dumping, una práctica ilícita que se hace para dejar fuera de juego a una empresa», indicó Prats, que aseguró que crear una empresa pública puede tener un riesgo importante, además de que para la Administración todo es más caro y por eso no es su objetivo principal.

Por eso apuestan más porque una naviera ya constituida entre en el mercado balear. Preguntado sobre si esta empresa podría tener ayuda de la Administración, el conseller explicó que ésta consistiría únicamente en las conversaciones para su implantación, ya que el Consell no tiene dinero para transporte marítimo, aunque recordó que siempre hay contratos de servicio público en los que se puede llegar a subvencionar líneas. «Ayuda directa no, pero sí conversaciones y explorar subvenciones», indicó Prats, que remarcó que en el caso de Formentera la creación de una naviera pública es más sencilla porque se trata de un sólo eje, algo que no pasa en las conexiones de Eivissa con la Península.

Por otro lado, el Consell y el Govern están negociando con el Gobierno central la modificación del Contrato de Servicio Público en las conexiones marítimas entre las Islas y la Península con el fin de rebajar costes. Actualmente este contrato, según Prats, es muy poco exigente.