La Guardia Civil ha vinculado el gran alijo de éxtasis hallado en una zona boscosa del término de Sant Josep con el grupo de británicos desmantelado este verano tras una intensa operación, bautizada con el nombre de Flecha, y que operaba en zonas de ocioprincipalmente de Sant Josep. Según informó este diario en su edición del sábado, un vecino halló enterrado un recipiente de plástico con gran cantidad de pastillas que podrían ser éxtasis y que acabó siendo un alijo de113.000 pastillas distribuidos en varios contenedores ubicados en las proximidades.

En un comunicado emitido hoy, la Benemérita ha recordadoque gran cantidad de pastillas mostraban logos que habitualmente portan este tipo de drogas de diseño para diferenciar unas de otras o de las organizaciones que las fabrican.

Así, las pastillas intervenidas, que pesaron unos 37 kilogramos, se encontraban en el interior de recipientes de plástico o bolsas de basura precintadas con cinta adhesiva para evitar la humedad.

Por las investigaciones, los agentes atribuyen la propiedad de la droga hallada a una organización compuesta por ciudadanos británicos que fue desmantelada el pasado mes de agosto en la Isla en el transcurso de la denominada Operación Flecha.

Concretamente, durante esta Operación, llevada a cabo por el Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO) de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil con sede en Baleares en colaboración con el SOCA (Agencia Británica de Lucha Contra el Crimen Organizado), se detuvo a 25 personas y se practicaron 12 registros domiciliarios interviniéndose 38.000 pastillas de éxtasis, 4 kilos de cocaína, 250 gramos de ketamina, 50 gramos de MDMA en forma de cristal, 4 litros GHB (éxtasis liquido), 1 kilo de M.CATS (mezcla de varias sustancias estupefacientes) y 56.000 euros.

Los detenidos eran integrantes de una organización dedicada al tráfico de drogas en Reino Unido que se habían trasladado a Eivissa, donde habían formado dos ramas, una responsable de establecer, dinamizar e impulsar la red en la isla y otra encargada de distribuir los estupefacientes, principalmente drogas de diseño.

De este modo, la red era dirigida desde Reino Unido por un grupo responsable del abastecimiento de los estupefacientes, realizando traslados ocasionales a Eivissa para supervisar el funcionamiento de estas actividades y recaudar los beneficios obtenidos con esta actividad ilícita.

Según informó la Guardia Civil en el comunicado de prensa de 31 de agosto de 2010, el grupo disponía de diversas cantidades de estupefacientes para su venta diaria en las proximidades de los lugares de ocio, si bien, el grueso de la droga era guardado en viviendas de seguridad o en zulos excavados y acondicionados en terrenos de difícil acceso.

En las labores de localización de los zulos han participado agentes del Equipo Contra el Crimen Organizado de la Guardia Civil (ECO) y diversas Unidades del mismo Cuerpo de las Pitiüses.