Obama recibió a Shakira, tras una reunión de la artista con funcionarios de su Gobierno en la que, además de la educación, también se trató el tema de la reforma migratoria.
Creada en 2006 por artistas, intelectuales y líderes empresariales de la región, la Fundación América Latina Solidaria (ALAS) es una organización sin fines de lucro que busca convertirse en un movimiento social que genere un compromiso colectivo de atención a los niños latinoamericanos.
Tras el encuentro, Shakira afirmó a la prensa que conversaron de que la inversión «en nuestros niños es la mejor estrategia que pueden usar los gobiernos para estimular el crecimiento económico, combatir la pobreza y alcanzar seguridad y paz mundial».
Quieren trabajar juntos
Obama y Shakira discutieron sobre la posibilidad de trabajar juntos para promover la educación temprana entre los hispanos de EE.UU. y cómo crear las bases para una alianza mundial para movilizar al mundo a favor de la educación de niños hasta los seis años de edad.
Shakira le propuso al presidente seleccionar un día del año próximo para «la primera cumbre mundial de presidentes y especialistas» en desarrollo infantil temprano para «definir nuevas políticas y compromisos», agregó el comunicado.
Obama, por su parte, se comprometió a apoyar las obras de Fundación Alas y pidió apoyo a Shakira para promocionar los esfuerzos del Gobierno por educar a las madres de niños hasta seis años de edad «en las técnicas de estimulación temprana que deben implementar con sus hijos», señaló la nota.
Según los portavoces de Shakira, los funcionarios de la Casa Blanca le indicaron que la Administración Obama está «trabajando duro para encontrar una solución y que esperan poder llegar a un acuerdo para legalizar a los indocumentados».
Nueva reunión con el vicepresidente
Miembros de los equipos de Shakira y Obama acordaron volver a reunirse la próxima semana para avanzar en ideas específicas en torno a la educación infantil temprana entre la comunidad hispana, indicaron sus portavoces.
Tras el encuentro en la Casa Blanca, la intérprete de «Hips don't lie», oriunda de Barranquilla, se dirigió al Banco Mundial donde tenía previsto inaugurar una nueva iniciativa de 300 millones de dólares para programas de desarrollo infantil en varios países de la región.
