Foto de archivo tomada el 13 de febrero de 2011 del cantante británico Seal (dcha) y de su mujer, la modelo alemana Heidi Klum (izq), mientras posan para los fotógrafos a su llegada a la 53ª ceremonia de entrega de los premios Grammy en Los Angeles, California. | Efe

Aunque ya no quedaban dudas de que entre Heidi y Seal no había  reconciliación posible, la pareja ha sellado ya su divorcio después  de tres meses de separación.

Parece que en estos casi tres meses el matrimonio no ha podido  arreglar sus diferencias y ya no hay nada que hacer, y después de  incluir una 'cláusula de silencio', Heidi, de 38 años, ya tiene los  papeles preparados para que Seal los firme.

La petición alega 'diferencias irreconciliables', según confirma  la revista People. Después de siete años de matrimonio, el divorcio  ya es oficial. Klum se queda con la custodia de sus cuatro hijos:  Leni (fruto de una relación anterior de la modelo con Flavio  Briatore, piloto de Fórmula 1), Henry, Johan y Lou.

Como para cualquiera, el divorcio no es una experiencia agradable,  y tanto uno como otro lo están haciendo de la mejor manera posible,  especialmente por sus hijos. Cuando la modelo alemana anunció su  separación el pasado mes de enero, dijo a los medios: «Hemos  disfrutado siete años de matrimonio llenos de amor, lealtad y  felicidad, pero tras mucha reflexión hemos decidido separarnos».


Tres meses de polémica

Seal y Heidi se casaron en México en 2005, y después de años de  amor, la relación se fue deteriorando, y la crisis se hizo evidente  cuando ambos se quitaron el anillo de casados. Fue entonces cuando  empezaron los rumores, y en enero se separaron.

Durante estos casi tres meses, la polémica no ha abandonado a  ninguno de los dos, sobretodo por parte de Seal, que no ha tenido  reparos en hablar de los trapos sucios de la vida conyugal, algo que  a Heidi no la ha hecho ninguna gracia. De ahí que haya añadido una  cláusula en la sentencia para que Seal no haga más declaraciones  sobre sus intimidades.