El ministro alemán de Economía, Wolfgang Schaeuble, (d), conversa con su homóloga francesa, Christine Lagarde, (i), antes del comienzo de un encuentro con sus homólogos de la zona euro. | Efe - OLIVIER HOSLET

La ministra francesa de Finanzas, Christine Lagarde, culpa a Alemania de los desequilibrios en la eurozona e insta a Berlín a impulsar la demanda interior para ayudar a los otros países miembros.
En unas declaraciones que publicó ayer el Financial Times, Lagarde afirma que los superávit comerciales de Alemania, basados en la contención de los costes laborales, no son sostenibles para el resto de los países de la zona del euro. «¿Podrían hacer algo los países con superávit?», se pregunta Lagarde, que agrega que hacen falta siempre dos «para bailar el tango».
«Alemania ha hecho claramente un buenísimo trabajo en los últimos diez años o así, al mejorar su competitividad y contener los costes laborales. Pero no estoy segura de que sea ése un modelo sostenible a largo plazo para el conjunto del grupo. Se requiere una mejor convergencia», explica la ministra.
Según Lagarde, la principal diferencia entre Alemania y Francia -y otros países de la eurozona- está en si Berlín debería impulsar, como piensa París, su demanda interna para ayudar a las industrias exportadoras de sus socios.
Lagarde no considera prioritario, por otro lado, el establecimiento de un Fondo Monetario Europeo como el propuesto por el ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schauble, aunque no lo descarta, pero señala que los países de la zona del euro deberían antes de nada asegurarse de que Grecia cumple las medidas de austeridad prometidas.
Control presupuestario
Además, con algo de «creatividad e innovación» podrían encontrar margen de maniobra suficiente en el tratado existente para reforzar la disciplina y el control presupuestarios.
En lugar de enmendar el tratado para crear un Fondo Monetario Europeo, tarea que «nos ocuparía otros tres o cuatro años», los países de la eurozona deberían adoptar lo que califica de «leyes suaves» tendentes a reforzar la disciplina.
En concreto, señala que «merece la pena» estudiar la posibilidad de adoptar sanciones más duras que las propuestas por su colega alemán.
Los ministros de Finanzas de la zona euro discutieron ayer, en vísperas de la reunión que hoy mantendrán, la concreción de un mecanismo de ayuda a Grecia, en caso de que su plan de saneamiento fuera insuficiente para ahuyentar las especulaciones sobre su solvencia y el Gobierno heleno viera dispararse el coste de la financiación de su deuda.