La carga fiscal de cada ciudadano de las Pitiüses, es decir la cifra resultante del pago de impuestos indirectos, directos y tasas, supone desembolsos de 7.036 euros al año en Eivissa y 7.012 euros anuales en Formentera, según los datos que arroja el Consell Econòmic i Social de les Illes Balears (CES) a través de su memoria económica de 2009.

A pesar de esta cifra, las Pitiüses se encuentran por debajo del resto de Islas ya que la media de Mallorca asciende a 7.194 euros y la de Menorca a 7.095 euros. Sin embargo, al igual que el conjunto de Balears, Eivissa y Formentera siguen superando con creces a la media nacional cuya carga fiscal durante el pasado ejercicio se quedó en 5.877 euros.

Según el CES, «una vez más el hecho insular, los llamados costes de la insularidad y el eco que tienen sobre los precios de los bienes de consumo, constituyen la razón de esta desviación de la carga tributaria que, comparada con la media de las tres comunidades autónomas de relevancia turísticas (Valencia, Andalucía y Cataluña), puede estimarse en una desviación del 10%».

Asimismo, la presión fiscal media por habitante en Eivissa se sitúa en el 28,71% del Producto Interior Bruto (PIB) de la isla, mientras que en Formentera es levemente menor, de un 28,61%. Aún así, al igual que ocurre en el resto del archipiélago, cuya media es de un 29,04%, las Pitiüses siguen teniendo una presión fiscal más alta de acuerdo a su riqueza, frente al escaso 26,22% que soporta el resto del territorio español.

Los municipios

Por municipios, los residentes de Sant Josep son los que pagan más. Cada habitante de este municipio desembolsa al año 7.158 euros en impuestos y tasas, y soporta la presión fiscal más alta de la isla, que asciende al 29,21%. En detalle, los residentes de este municipio pagan una media de 2.771 euros en impuestos directos, 3.911 en impuestos indirectos, y 475 euros en tasas.

Sant Antoni le sigue muy de cerca con una media de pago por habitante de 7.125 euros anuales y una presión fiscal del 29,07% por contribuyente. Cada ciudadano paga 2.777 euros en impuestos directos, 3.947 en impuestos indirectos y 399 en tasas.

Sant Joan se encuentra en tercer lugar porque sus residentes tienen una carga impositiva de 7.005 euros al año y una presión fiscal del 28,58%. Por impuestos directos, cada habitante paga una media de 2.641 euros; por impuestos indirectos, 3.938 euros y, por tasas, 425 euros.

En cuarto lugar se ubica Vila, ya que sus residentes pagan 6.985 euros al año, con una presión fiscal que se sitúa en el 28,50%. En impuestos directos, cada residente en este municipio desembolsa 2.675 euros; en impuestos indirectos, 3.844 euros, y en tasas, 425 euros.

Son los residentes de Santa Eulària los que menos pagan al desembolsar 6.972 euros anuales. La presión fiscal por habitante es del 28,45% y, por impuestos directos, el pago anual es de 2.651; por impuestos indirectos suma 3.892 euros y, por tasas, de 428 euros.

La media insular, de 7.036 euros anuales por habitante, se desglosa en 2.701 euros por el pago de impuestos directos, 3.903 euros por el pago de impuestos indirectos, y 430 euros por tasas.

Por último, en Formentera, la media por habitante al año es de 7.012 euros, con una presión fiscal del 28,61%. Cada formenterés paga en impuestos directos, 2.628 euros, por impuestos indirectos, 3.903 euros y, por tasas, 480 euros.