Cicatriz, ya disponible en tu plataforma digital. | Youtube: KikoRiveraVEVO

«Aunque logre borrarte, quedarán las cicatrices». Así de contundente se ha dirigido Kiko Rivera a una persona que ya forma parte de su pasado. Y lo ha hecho en su nueva canción, Cicatrices, cuyo mensaje (y videoclip) es toda una declaración de intenciones en medio de su guerra familiar con Isabel Pantoja.

El tema, que este martes se encuentra entre las tendencias de YouTube, contiene frases como «vi de cada una de tus fotos pensando qué sería de nosotros» o «estás tatuada en mí», lo que hace sospechar que el artista habría pensado en su madre a la hora de componer su nuevo trabajo.

Pero eso no es todo, pues Rivera aparece llorando en el videoclip mientras contempla una fotografía en la que una mujer juega con un niño pequeño. Se trata de una instantánea que, a pesar de haber sido tomada a contraluz, recuerda a una madre con su hijo. De hecho, los fotografiados comparten un gran parecido físico con la tonadillera y el Dj, e incluso podrían ser ellos.

Además, el Dj decide quemar la fotografía como si deseara borrar el pasado o dejarlo atrás. «Mañana para mí es un día especial: llega esta canción en un año muy jodido y en un momento personal delicado», escribió Rivera el pasado lunes en Instagram, anunciando que ha firmado con Universal.

La firma con esta conocida discográfica, así como sus visitas a los platós de Mediaset, supone una nueva oportunidad para mejorar la delicada situación económica que el Dj anunció estar atravesando meses atrás.

Por su parte, la tonadillera parece estar buscando la reconciliación con su «pequeño del alma»: no tiene ganas de reproches, intenta levantar el ánimo y ha recuperado el control de su teléfono móvil. Asimismo, su hija, Isa Pantoja, asegura que no ha conseguido contactar todavía con la artista.

«A mi madre le hace falta un psicólogo», ha confesado la exconcursante de La casa fuerte en su última entrevista. Y es que la influencer se siente muy preocupada por la salud de su madre: «Me da miedo que no tenga ganas de vivir».