mpecé a trabajar el cuero hace 40 años. Recuerdo con mucho cariño la primera pieza que hice: un cinturón para la que entonces era la chica que me gustaba. Era ancho; parecía más un cinturón de caballo que de chica, pero le encantó. Ahora es mi mujer», cuenta Pedro Planells, artesano especializado en cuero, quien recuerda además que ese cinturón le abrió todo un mundo empresarial: «Con esa pieza una gente me financió para trabajar en Inglaterra. Allí estuve muchos años; la verdad es que no recuerdo cuántos».
Y fue en la década de los 70 cuando decidió regresar a la isla para abrir su primera tienda. Desde entonces no ha parado de trabajar y, poco a poco, se ha ido consolidando como uno de los artesanos en cuero referente en el panorama ibicenco. Quizá sea su precisión o el gusto de los pequeños detalles lo que le ha llevado a trabajar con diseñadores tan importantes como Valentino, Giorgio Armani o Jean Paul Gaultier, con quien mantiene una relación laboral en la actualidad. «A Gaultier le hago los accesorios en cuero desde 1999. Vino un día y me pidió un trabajo para la pasarela de París. Hice sandalias de cuatro pisos, cinturones increíbles...es un gran profesional, muy perfeccionista porque le gusta todo al mínimo detalle; un desfile de Gaultier está pensado al milímetro», cuenta Planells. Además de mantener amistad con Gaultier, Pedro también es amigo de Armani: «Cuando viene en verano suele pasar por la mañana y por la tarde, se sienta y observa la tienda. Muchas veces me dice '¡Pedro no toques nada de la tienda porque caerás en la vulgaridad. Así está perfecta!'». Y añade: «Por aquí vienen muchos famosos. Tengo tres cajas llenas de fotos con ellos». En la actualidad, Planells dispone de una página web (www.pedrosibiza.com).