Última derrota a domicilio

El Palacio de Congresos de Ibiza sigue ampliando su cuenta negativa en Liga Femenina. En esta ocasión el conjunto que entrena Àlex Pérez perdió en su visita a la pista del Argón Uni Girona (58-51) y cerrará la competición sin ser capaz de sumar ningún triunfo a domicilio. Ayer pudo conseguir esa primera victoria como visitante, pero un parcial de 12-2 en los últimos minutos cortó cualquier posibilidad de sorprender al Girona en su pista.
El encuentro empezó con malas sensaciones para el Palacio de Congresos, que empezó encajando un 5-0 por mediación de la senegalesa Astou Traore, que en este primer cuarto anotó 11 de los 19 puntos de su equipo. El conjunto ibicenco, mientras tanto, tardó en despertar y, para cuando lo hizo, ya perdía por nueve puntos de diferencia (18-8, minuto 8).
En el segundo cuarto mejoró algo el panorama. Un parcial de 4-11 recortó las diferencias (21-19, minuto 13) pero sólo por escasos momentos. Traore y Chones volvieron a la carga y el Girona, con un 9-0 a su favor, puso la máxima diferencia en el marcador (30-19, minuto 18). Infante, poco antes del descanso, estableció el 30-21 definitivo con el que ambos equipos se fueron a vestuarios.
El tercer cuarto tuvo un nombre propio para el Palacio de Congresos: Nakia Sanford. La estadounidense fue la autora de los 10 puntos conseguidos por su conjunto en ese periodo. Nadie parecía capaz de asumir la responsabilidad de mirar hacia el aro contrario y Sanford se echó el equipo a sus espaldas. Eso sí, las imprecisiones hacían que el marcador, al final de tercer cuarto, fuese ridículo: 38-31.
El último capítulo del partido fue, con diferencia, el mejor del choque. Dos triples consecutivos de Pee Wee Johnson, que pedía su cuota de protagonismo, pusieron a su equipo a sólo un punto por debajo en el marcador (42-41, minuto 33). Tres minutos después, Vaughn colocó un esperanzador 46-46, que obligó a Anna Caula a pedir tiempo muerto. El Palacio de Congresos llegaba al momento decisivo del partido con opciones de victoria. Sin embargo, sólo fue un espejismo. Un parcial de 12-2 a favor de las catalanas puso las cosas en su sitio y cerró cualquier posibilidad de enmienda esta temporada de las ibicencas.