n bombero se descuelga desde la azotea para llegar al balcón del cuarto piso donde estaba la casa y poder asistir a la anciana que estaba en apuros.

Bomberos y Policía Local de Eivissa se movilizaron al mediodía de ayer para auxiliar a una mujer de 89 años, vecina de la avenida Ignasi Wallis, que se hallaba atrapada en su domicilio después de haber sufrido una caída y verse imposibilitada de pedir ayuda tras quedarse postrada en el suelo sin poder moverse. Fuentes relacionadas con el operativo señalaron que la víctima llevaba varias horas en esta situación y otras, a su vez, indicaron que más de un día.

El suceso tuvo lugar en un cuarto piso del número 41 de la avenida Ignasi Wallis cuando una persona próxima a la afectada fue a su domicilio a interesarse por su estado.

Sin ambulancia

Al ver que no podía acceder a ella y descubrir que estaba en apuros, se dio aviso a las emergencias. Dotaciones de la Policía Local y de los bomberos fueron activadas a las once y media de la mañana al tiempo que se requería una ambulancia al temerse seriamente por el estado de salud de la anciana.

Ni los agentes locales ni los bomberos pudieron acceder a la vivienda por su puerta de entrada porque el cuerpo de la mujer caído lo bloqueaba. Ante ello, sobre el mediodía y cuando aún se esperaba la llegada de la ambulancia solicitada, se optó por lanzar una cuerda desde la azotea del inmueble, desde la que se descolgó uno de los bomberos, hasta la terraza de la casa de la mujer. Una vez en el balcón, el bombero pudo entrar en la vivienda, asistir a la afectada, consciente pese al accidente, y abrir seguidamente la puerta a sus compañeros y a los policías locales. Ello coincidió prácticamente con la llegada de una unidad de emergencias de Atención Primaria dotada de un médico y de una enfermera. La anciana, que se quejaba de múltiples magulladuras, pudo ser entonces atendida, en principio de lesiones no graves, mientras se valoraba con sus personas cercanas si era conveniente su traslado al hospital.