La asociación de voluntarios Magna Pityusa presentó ayer su primer barco escuela en el que seis personas discapacitadas podrán aprender a navegar a vela para más tarde empezar a competir por sí solas. «Este tipo de barco se llama gamba. Caben seis personas y está diseñado para que seis personas discapacitadas aprendan a navegar. Está subvencionado en parte por la conselleria de Benestar Social del Consell d'Eivissa y el Blue Marlin. El diseño está hecho por María Piña, una niña que ganó el concurso balear de cómics», afirmó José Pedro García, coordinador de deportes de la asociación Magna Pityusa. Esta embarcación mide 5 metros con 25 centímetros de largo y dos de ancho.
«Quería dar las gracias a la asociación porque está consiguiendo que en Eivissa podamos vivir más de cara al mar; siempre hemos estado un poco hacia el interior, sobre todo con las personas que tienen algún tipo de discapacidad. Parecía que era imposible que alguien pudiera hacer vela o algún tipo de deporte y ellos están demostrando que no existen límites ni fronteras para nadie y esa es la labor más importante que puede hacer una asociación», afirmó Patricia Abascal, consellera de Benestar Social del Consell d'Eivissa, que asistió a la presentación en compañía de Isabel Aguilar, presidenta de la Federació Balear d'Esports per a Persones amb Discapacitat (FEBED), Antonio Sánchez, representante de Magna Pityusa y Mattia Uliveri, gerente de Blue Marlin, empresa patrocinadora del equipo de regatas (esta asociación de voluntarios fue la primera en participar en la regata de la Ruta de la Sal con un equipo compuesto por personas discapacitadas). El Club Náutico de Santa Eulària también colabora con el proyecto de enseñanza de vela.
Magna Pityusa se creó en 1999 con el objetivo de fomentar las actividades de voluntariado en las Pitiüses y luchar por una integración plena de colectivos con discapacidad.