El Ministerio Público ha solicitado la expulsión de un residente paraguayo de 30 años de edad, J.M.O.A., que está acusado por los delitos de maltrato sobre sobre su pareja, amenazas y atentado, y las faltas de lesiones y contra el orden público, informaron ayer fuentes judiciales. Ante el juez del Juzgado de Violencia Contra la Mujer el hombre, que se encuentra en el país en situación migratoria irregular, dijo que no recordaba nada de lo sucedido. Está acusado de presentarse en la casa de su pareja armado con un cuchillo tras haber anunciado su intención de matarla.

El incidente ocurrió a primera hora de la madrugada del pasado domingo en un domicilio de la avenida Pedro Matutes Noguera de Vila. La Policía Local intervino en dicho inmueble después de recibir un aviso que indicaba que había un individuo aporreando una puerta.

Tras recogerse testimonios de varios vecinos, los agentes averiguaron que el sospechoso había supuestamente golpeado el día anterior a una mujer que vivía en la casa en una disputa en la que también la había amenazado de muerte. Ante estos datos, los, policías realizaron una batida por los alrededores del edificio. Minutos después se localizó a J.M.O.A.

En la cintura

Tras cachearlo, se le requisó un cuchillo de grandes dimensiones que llevaba oculto en la cintura. La víctima, una mujer también de nacionalidad paraguaya de 27 años, identificó a su novio tras salir a un balcón.

La afectada fue trasladada al hospital de Can Misses y a Comisaría para que pudiera tramitar la denuncia. Según el atestado policial, J.M.O.A. mantuvo su carácter violento cuando también era llevado a Comisaría. El sospechoso (siempre según esta versión) la emprendió a golpes con la puerta del coche patrulla y no dejó de insultar y amenazar a los agentes. Durante su detención, además, supuestamente atacó a un agente al que propinó una patada en una pierna.