«Vamos a ir a muerte contra los lituanos. Nadie daba un duro por nosotros en la segunda fase, pero hemos llegado hasta aquí y ahora puede pasar cualquier cosa», aseguró el base Iván Corrales, que cubrió el desplazamiento entre Pau y París con el resto de la expedición española en una avión de la compañía Air France. La clasificación de la selección nacional para los cuartos de final en el último momento, gracias al triunfo de Francia sobre Eslovenia tras una espectacular remontada de los franceses en la segunda mitad, ha reforzado la moral de los jugadores de Lolo Sáinz.

«Lo que ocurrió el lunes por la noche nos va a dar mucha confianza para enfrentarnos a Lituania, aunque sabemos que es un rival complicado, pero somos conscientes de que nos estamos jugando la clasificación para Sydney, y ese es un objetivo que debemos cumplir», apuntó el pívot del Estudiantes Ignacio de Miguel.

La derrota de Yugoslavia ante Rusia, que pudo costarle el pase a España, ha sido muy comentada por los internacionales y la delegación española. Alfonso Reyes dedicó el pase del equipo nacional «a los yugoslavos», que comparten el mismo hotel de concentración que España.

Sin embargo, Zeljko Obradovic, seleccionador yugoslavo, ha asegurado que su equipo «hizo todo lo que pudo por ganar, aunque cada uno es muy libre de pensar lo que quiera, pero resultan molestas las suspicacias». En cualquier caso, la derrota de Yugoslavia condenó al combinado español a la cuarta plaza del Grupo E y al cruce con Lituania, uno de los favoritos del torneo.