El presidente en funciones, José Ramon Marí, presidió ayer la Asamblea Extraordinaria de la Peña Deportiva. Foto: GERMÁN G. LAMA.

No hay problema. La Peña Deportiva de Santa Eulària es una piña más que nunca, o al menos eso es lo que se dijo y palpó ayer en la Asamblea Extraordinaria del club, a la que asistieron cerca de 20 socios. La sede del club fue el escenario de esta esperada Asamblea, que se convocó con motivo de la falta de apoyo mostrado a la directiva en la última reunión y el consiguiente anuncio de dimisión irrevocable de la Junta del club. En primer lugar el gerente procedió a la lectura de los acuerdos adoptados en la última Asamblea ordinaria, celebrada hace unas semanas.

A continuación se pasó al punto más conflictivo. José Ramon Marí, presidente en funciones, informó a los presentes de la intención de Vicente Segovia"presidente del Eivissa"de hacerse cargo del club. Los socios rechazaron por unanimidad esta posibilidad, con duras intervenciones en contra. La Asamblea fue más lejos y aprobó una moción por la que Segovia sólo podrá ser socio de la Peña si lo aprueba una Asamblea General del club. El motivo, según el socio que la propuso, fue «la falta de respeto» mostrada por Segovia hacia la gente de Santa Eulària.

Por otra parte, el presidente enunció los problemas económicos que conlleva el crecimiento del club, con 15 equipos para la próxima campaña. Marí afirmó que cada plantilla cuesta un promedio de 1'5 millones y por ello solicitó el apoyo de todo el entorno.