1 ESPAÑA: Casillas, Curro Torres, Puyol, Nadal, Sergi, Xavi, Baraja, Joaquín, Vicente, Tamudo y Morientes.
Cambios: En la segunda parte entraron Cañizares, Juanfran, Salgado, Téllez, Helguera, Valerón, Mendieta, Munitis y Tristán.
1 PORTUGAL: Ricardo, Jorge Costa, Rui Jorge, Frechaut, Couto, Vidigal, Figo, Joao Pinto, Pauleta, Viana y Conceiçao.
Cambios: En la segunda parte entraron Beto, Andrade, Dimas, Barbosa, Paulo Bento, Nuno Gomes, Capucho y Simao.
ÀRBITRO: Alexandru Todor (RUM). Tarjetas amarillas a Fernando Couto, Figo.
GOLES:
0-1 minuto 29, Jorge Costa.
1-1 Minuto 39, Morientes.

Agencias
La selección española empató a uno con Portugal, a la que lleva 43 años sin ganar, pero aprobó el examen al que había sometido el seleccionador José Antonio Camacho a algunos jugadores jóvenes que demostraron que pueden ser piezas importantes en el Mundial de Corea y Japón. El combinado español supo remontar con un gol de Fernando Morientes el tanto de ventaja que consiguió Portugal mediada la primera parte, gracias a un testarazo de Jorge Costa. Una de las sorpresas más agradables del encuentro fue la frescura y capacidad de desborde aportadas en la banda derecha por el jugador del Betis Joaquín, en el que fue hoy su debut con la selección española. España y Portugal ofrecieron una animada primera parte, ya que ambos equipos saltaron al césped sin tenerse demasiado respeto y se mostraron decididos en lanzarse al ataque.

Tras unos primeros minutos de igualdad sobre el césped, Portugal fue haciéndose poco a poco con el centro del campo y tuvo en las jugadas de estrategia a balón parado y en la constante movilidad de Luis Figo a sus mejores armas. Una falta sacada rápidamente por Sergio Conceição sobre Figo inquietó la portería de Iker Casillas en el minuto 11 y fue fruto de otra falta como se originó el gol portugués. Corría el minuto 29 cuando Luis Figo lanzó una falta centrada y encontró la cabeza de Jorge Costa envió de un testarazo el balón a la red. España, que hasta entonces sólo había llevado el peligro en una acción aislada de Joaquín o un centro de Xavi Hernández que Fernando Morientes remató fuera de cabeza, no se vino abajo con el gol, sino que vivió a partir de entonces sus mejores minutos.

En el 38, Vicente Rodríguez obligó al portero portugués Ricardo a realizar una gran intervención, mientras que en el 41 llegó el tanto del empate, precisamente también en otra jugada a balón parado. La jugada se inició en una falta que Xavi sirvió hacia Carlos Puyol, cuyo disparo desviado fue controlado por Fernando Morientes dentro del área pequeña, tras lo que perforó con facilidad la red. Tras realizar cinco cambios en el descanso, España salió decidida claramente a ganar el partido, aunque la victoria no llegó.