Efe. OSAKA (JAPÓN)
Turquía se clasificó como semifinalista del Mundial de Corea y
Japón con un gol de oro de Mansiz, marcado a los cuatro minutos de
la prórroga de un infumable partido que había terminado con un
empate a cero y que fue un producto típico de este torneo por la
abundancia de errores y de carencias técnicas.
Ambos equipos, y principalmente el turco, perdieron numerosas
ocasiones de marcar en jugadas cuya profundidad era generada por
fallos defensivos y su falta de gol por distracciones, falta de
puntería y llegadas tarde en un compendio de ineptitudes.
El equipo turco comenzó el torneo con una derrota frente a
Brasil (0-2) en un partido polémico, empató con Costa Rica (1-1) y
goleó a China (3-0) en la primera fase, pero su gran victoria fue
la que consiguió en octavos ante uno de los organizadores del
Mundial, Japón, equipo al que venció por 1-0.
Senegal jugó con soltura y profundidad durante los primeros 20
minutos del partido, en los que llegó reiteradamente a través de
Diouf, Diao y Bouba Diopa hasta los dominios del portero Tony
Sylbva, cuya defensa, al contrario de anteriores ocasiones, hacía
agua por todos lados. Los senegaleses jugaban con suficiencia en
las cercanías del área rival, pero en los intentos de progresar en
esa zona perdían claridad y precisión.
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