Carlos de Torres FRANCIA
El Tour se acerca a los Pirineos con el pronostico en punto muerto y anuncia una dura batalla por el maillot amarillo entre el actual dueño, el español del ONCE Eroski Igor González de Galdeano y el estadounidense Lance Armstrong, favorito indiscutible que conoció la derrota en la contrarreloj del lunes.

Armstrong se exhibió en el prólogo y muchos pensaron que la emoción del Tour quedaba reducida a saber quien sería segundo en París, pero la carrera se presenta abierta en la antesala de los Pirineos, donde esperan dos temibles etapas con final en alto. Será el escenario de batallas que prometen ser apasionantes.

El Tour agradece que el triunfo de Botero haya despertado más interés por la carrera y beneficiado al espectáculo. Los equipos españoles llegaron en avión por la mañana a Burdeos procedentes de Nantes y en la ciudad bordolesa salieron a rodar dos ó tres horas. El resto del tiempo lo dedicaron a descansar ante la dura semana que se presenta.

Por su parte el francés Laurent Jalabert anunció en Burdeos, que cuando acabe la presente temporada se retirará del ciclismo profesional, tiene 33 años y aseguira que es duro dejarlo.