El jugador de la SD Eivissa, Robert, vuelve al once inicial frente al Manacor.

La SD Eivissa se juega toda la temporada en el partido que le enfrenta hoy a partir de las 17,00 horas al Manacor en tierras mallorquinas. Ambos equipos pelean por una de las dos plazas para jugar la liguilla de ascenso a la Segunda división B. Al conjunto ibicenco sólo le vale la victoria ante el equipo manacorí para conseguir entrar en la fase de ascenso ya que, en estos momentos, ocupan la quinta plaza con 63 puntos.

Por su parte, los hombres de Jaume Mut están situados en la tercera plaza con 65 puntos por lo que un empate les bastaría para lograr el objetivo. El Poblense es el tercer conjunto en liza que lucha por la liguilla de ascenso también con 65 puntos. El equipo ibicenco podría llegar a ser, incluso, tercero dependiendo de los resultados de la última jornada. La SD Eivissa recupera para este partido a dos jugadores básicos en el sistema de juego del técnico Toni Arabí como es el caso del centrocampista Robert, el portero titular Paco Muñoz y Juan, que cumplieron un encuentro de sanción en la jornada aplazada que se jugó el pasado martes donde los ibicencos vencieron por la mínima al Peguera con un tanto de Pablo Ibarra. Por contra, el conjunto pitiuso no podrá contar con los jugadores Edu Páez, que no podrá jugar por acumulación de tarjetas. Por parte del cuadro mallorquín, hay que destacar la baja de Antonio Muñoz Llompart por producirse de manera violenta con un contrario.

El técnico de la SD Eivissa, Toni Arabí, sabe que no le vale otra cosa que la victoria: «No hay más solución que conseguir los tres puntos si queremos jugar la liguilla de ascenso. El equipo llega bien a este partido, con muchas ganas e ilusión». El entrenador ibicenco reconoce que el partido se presenta muy complicado: «La verdad es que nos jugamos una final frente al Manacor. Ellos tienen un gran bloque y cuenta con un equipo compensado en todas sus líneas». Toni Arabí también destacó que «el Manacor tiene a dos buenos jugadores en ataque como es el caso de Paco Coll y Martorell».