Imagen del reportaje que salió publicado en AS el 14 de noviembre de 1998.

Gustavo López

El 14 de noviembre de 1998 el diario deportivo nacional AS publicaba una entrevista de dos jugadores con parecidos más que razonables. Roberto Carlos, jugador del Real Madrid, y Víctor Pereira, otrora jugador del filial madridista, ahora en las filas de la SD Eivissa. El rotativo titulaba «Clónicos». Y es que tras ver sobre el campo al '3' madridista y al '3' del club pitiuso, la similitud se acrecienta todavía más.

Víctor oye casi a diario, por parte de sus compañeros, su semblanza con el brasileño. Además, tras el golazo que marcó ante la Peña desde 25 metros, todavía más. «Me lo recuerdan cada día. Aparte, me llevo bien con Roberto, al que conocí en la entrevista de AS. De momento por la calle no me han parado para firmar autógrafos o algo así. A mi me encanta como juega Roberto», resaltó. Con 24 años el objetivo próximo es jugar en un equipo de superior categoría. Y quiere que sea en el Eivissa. «He venido aquí para subir al Eivissa, porque me llamaron equipos de Segunda B y preferí venir aquí porque es buen escaparate», comentó.

El defensa del conjunto de Herráez afirmó que no ha tenido la oportunidad de dar el salto a una categoría profesional debido a las lesiones. « El último partido de pretemporada del año pasado me lesioné el cruzado anterior y estuve nueve meses parado. Antes también había estado en el dique seco durante cinco meses por una rotura de fibras y era cuando mejor estaba», explicó. Para Víctor Pereira el objetivo de jugar la promoción con el Eivissa es «muy factible». «Por lo que me cuentan el grupo balear tiene a cinco o seis equipos fuertes, aunque no lo conozco».

En cuanto al derbi ante la Peña el jugador del club pitiuso vio «un partido medio tosco al principio. Tanto ellos como nosotros nos respetamos mucho. Tras el primer gol todo cambió a mejor. Pienso que nos falta rodaje, pero hasta la décima jornada no se verá al verdadero equipo», indicó Pereira, que dedicó el gol al presidente, Mariano Riera. «Cuando marqué el gol se me pusieron los pelos de punta y quise dedicárselo al presi porque es un hombre que vive el fútbol las 24 horas del día», sentenció.