Miquel Bestard ya es oficialmente el nuevo presidente de la Federación Balear de Fútbol (FBF). Así lo decidieron los representantes del balompié isleño en las elecciones del pasado 14 de septiembre, pero faltaba la proclamación de la asamblea para que el gestor de Bunyola asumiera el cargo y pasara a ocupar la poltrona de Son Malferit. Como no podía ser de otra forma, obtuvo el apoyo necesario para asumir la presidencia gracias al respaldo de la gente de su confianza y ya ha comenzado a trabajar en un nuevo ciclo que se presume apasionante para el deporte rey de la Comunitat.

A la asamblea general extraordinaria asistieron los 36 asambleístas que habían designado las urnas hace algo más de un mes, además de la junta electoral, el asesor jurídico de la FBF y el secretario general de la Federación que dieron validez al proceso sin ningún tipo de incidencia. Tampoco faltó el director general de deportes del Govern balear, Pepote Ballester, que felicitó a Miquel Bestard a las puertas del mandato que acaba de iniciar. A lo largo del acto ninguno de los asambleístas tuvo que ejercer su derecho al voto ya que Bestard había sido avalado por todos ellos en el transcurso de las elecciones.

El nuevo presidente agradeció a los asistentes su presencia y aseguró que su principal objetivo de cara a los próximos cuatro años es abrir la Federación a todo el mundo y modernizar sus estructuras para garantizar el perfecto funcionamiento de la misma. Bestard afirmaba que «es un orgullo acceder a este cargo con el apoyo de todas las personas representadas aquí. Esto me refuerza en la idea de que toda la gente del fútbol tiene que estar unida». El nuevo inquilino de Son Malferit señalaba además que «quiero que la Federación sea la casa de todo, sus puertas están abiertas para todo el mundo. Quiero escuchar a toda la gente que trabaja por el bien de nuestro fútbol».

El presidente, que en este arranque del nuevo ciclo comenzará a trabajar para cumplir con todo lo expuesto en su programa electoral, dará a conocer la próxima semana la composición de la nueva junta directiva de la Federación.