En plena cuenta atrás para que el Lisboa-Dakar 2006 eche a rodar, Toni Manresa ya piensa únicamente en la carrera. El piloto de Calonge superó el primer test que impone la organización y las verificaciones técnicas y administrativas dejan claro que el Nissan Patrol GR que pilotará en compañía del formenterense Xicu Ferrer está en condiciones de pelearse con los mejores. «Estoy más motivado que nunca», admite el piloto del Nismo Challenge, quien destaca el ambiente que se generó en la presalida de Madrid y en el parque cerrado de la capital portuguesa.

«Se nota que tienen ganas de hacerlo bien y parece que va a tener continuidad la salida aquí. Pero es el ambiente del paddock el que te atrapa y te da más alas», admite el balear en la que será su tercera participación en la que, para muchos, es la más dura prueba del mundo del motor.

Toda vez que ya ha tomado contacto con su coche, las sensaciones no pueden ser mejores, y cada vez tiene más claro que «muy mal tienen que ir las cosas para no llegar a Dakar. Lo vamos a intentar y espero no defruaudar a todos los que me han apoyado, que es lo que más temo. Lo demás, creo que ya lo conozco después de las experiencias vividas en las ediciones anteriores».

El vehículo
Sobre el Nissan recuerda que «es un vehículo muy fiable» y que, al mismo tiempo, en la edición de 2006, contará con la asistencia técnica de Nismo «lo que es una garantía. Saben muy bien cómo funciona el Dakar y no se les escapa nada. Ahora iremos hacia Málaga y estaremos un tiempo alejados de la cobertura oficial, pero lo que nos han mostrado es excepcional. Se nota que lo tienen todo muy controlado. Y este tipo de cosas en una competición de estas caracteríticas se valora mucho. A nosotros nos va a dar mucha tranquilidad».

De sus rivales, Toni Manresa es consciente de que «la mayoría tiene muchos más medios», pero recuerda a la vez que «el desierto está lleno de trampas y de ellas no se libra nadie, ni el que tenga mejor coche. Es evidente que tener mejores condiciones te puede beneficiar, pero hay que recordar que es una carrera muy complicada».

Desierto
No sólo está gozando del apoyo de Nismo, sino que hasta Lisboa han llegado directivos de la cervecera Súper Bock, uno de sus principales patrocinadores en su tercer asalto al desierto. «Se preocupan mucho conmigo, y a ellos también les debo estar aquí y les brindaré mi llegada al Lago Rosa. Vamos a pelear por ello y por ellos, que tanta confianza han depositado en nosotros», concluyó un Manresa que aprovecha la ocasión para agradecer «los apoyos de la gente de Balears. Más allá de Calonge o Santanyí, por estos aficionados o seguidores anónimos estamos obligados a llegar», explicó.

Esta va a ser la tercera aventura de Toni Manresa en el Dakar, la primera a los mandos de un coche. En las dos anteriores citas el mallorquín participó en la modalidad de camiones, acompañado por Pep Vila y Moll Torrallardona. En las dos ocasiones terminó.