El Día del Pedal 2008 fue, como de costumbre, un éxito de participación. El buen tiempo y el cierre de gran parte del centro de la ciudad son un reclamo irresistible para los ciudadanos. De hecho, 1.769 de ellos decidieron acudir a la cita y se inscribieron en las mesas que la organización del Ayuntamiento de Eivissa dispuso para tal fin. Sin embargo, es de esperar que algunos otros 'locos' de la bicicleta se apuntaran por su cuenta y riesgo sin inscribirse en el registro oficial.

La cumplimentación del citado registro motivó que la jornada comenzará con cierto retraso, ya que se esperó a terminar de apuntar a todos para comenzar el recorrido.

La concentración de la mayoría de los participantes se produjo en el boulevard Abel Matutes. 1.287 de los 1.700 inscritos se apuntaron allí e iniciaron el recorrido desde la citada plaza.

Los 482 restantes se unieron a la iniciativa en los cuatro barrios que participan cada año en la marcha. San Pablo inscribió a 214 ciclistas; Cas Serres a 78; Figueretes a 123, y Platja den Bossa a 67.

De todos cuantos participaron una parte importante eran niños. El Día del Pedal es la jornada perfecta para que los más pequeños disfruten de las calles. Es la ocasión para que los que normalmente no pueden moverse libremente por la ciudad, bajo el dominio del tráfico, lo hagan aprovechando que la situación se invierte, aunque sea por un día.

Para los más pequeños había, además, actividades especiales, puesto que la organización había dispuesto un recorrido infantil de 3 kilómetros con actividades en el paseo Abel Matutes, destinado a los que tuviesen entre 5 y 9 años.

Para los, aún más pequeños, se marcó un circuito baby de un kilómetro para triciclos. Todo ello aderezado con sorteos de regalos y bicicletas entre los participantes, además de la camiseta que le daban a todo el que se inscribía.

Policía Local y Protección Civil fueron los organismos encargados de vigilar el recorrido y asegurarse de que las casi 2.000 bicicletas tuviesen el paso libre por las calles de Eivissa. No hubo incidentes a destacar aunque si algo de confusión en algunas partes del recorrido, puesto que el dispositivo no lo cubría del todo, lo que provocó que en algunas calles, como en la avenida España se mezclasen ciclistas y coches.

Afortunadamente, la sensatez de todos hizo que todo se quedase en una anécdota. No obstante, la falta de claridad en el dispositivo obligó a alguna que otra patrulla policial a participar en el dispositivo sin haber sido asignada al mismo desde el principio. Y eso fue todo.

Por lo demás, los participantes disfrutaron de la libertad de contar a su disposición con calles como Ignasi Wallis, Isidor Macabich, País Valencià, avenida España, Vara de Rey, avenida Santa Eulària, paseo Juan Carlos I, dique de Botafoc, paseo 8 d'Agost y Bartomeu Rosselló entre otras.

En la plaza Albert i Nieto se diseñó un circuito de educación vial para los niños.