La SE Eivissa afronta hoy un partido intrascendente para sus intereses, dado que ya no tiene opciones matemáticas de conseguir la permanencia, ante un Alzira que sí está necesitado de puntos. El equipo valenciano es penúltimo con 32 puntos, tres más que los rojillos, y están a siete de puesto de promoción, por lo que incluso la victoria podría resultar insuficiente si el Benidorm suma los tres puntos.

Alfredo Santaelena, entrenador de los ibicencos, aprovechará la ocasión para dar minutos a jugadores poco habituales. De hecho, Pierre y Samir están en la convocatoria, de la que se han caído jugadores importantes como Pisano y Diop. Alfredo comentó ayer que no van convocados por «decisión técnica», pero, tal y como avanzó Ultima Hora en su edición del pasado día 14, se trata más bien de un castigo impuesto desde arriba. No hay que olvidar que, como apuntó este rotativo, el presidente Pedro Ortega bajó al vestuario al término del partido contra el Terrassa dispuesto a fulminar a ambos arietes. Así las cosas, el equipo rojillo, como ya hizo hace dos semanas ante el Gavá, jugará sin delanteros natos. Otros futbolistas que no están en la lista de hoy son De Pablos, Javi Moreno y Àngel Sánchez.

En esta recta final, lo único importante para Alfredo es «seguir trabajando con la misma intensidad que ante el Gavà y el Valencia. El equipo peleó hasta el último momento, en Gavà para empatar y en Valencia, para ganar. Desde que llegué no hemos tenido suerte. El fútbol es un juego y a veces la suerte influye».

Yoyo Ocaña, técnico del Alzira, sabe que la salvación está muy complicada, pero advirtió que su equipo «no bajará los brazos en los tres partidos que quedan». El preparador del cuadro valenciano, que verá el partido desde la grada después de haber sido expulsado la semana pasada durante el partido que los suyos perdieron ante el Alcoyano (2-1), señaló que «el equipo se supera poco a poco». «Tengo miedo a que no nos dé tiempo para llegar al objetivo final. Hay que seguir intentándolo mientras sea posible», explicó.