La continuidad o no de Jordi Fernández al frente del EBE Ibiza Puig d'en Valls no se conocerá hasta el martes. A pesar de que el técnico y la directiva tuvieron tiempo para hablar largo y tendido el viernes en la cena de despedida de la temporada, las dos partes se han emplezado para mantener una reunión más formal este martes, en la que ya debe decidirse si Fernández sigue al frente del equipo o si, lo que ahora mismo parece lo más probable, tiene que hacer las maletas después de cinco años en el club. «Tampoco tenemos prisa por hablar. La economía del club sigue siendo bastante complicada y las dos partes tendremos que hacer un esfuerzo si queremos llegar a un acuerdo», aseguró ayer el entrenador catalán, que afirma que el lustro que lleva en el PDV y las dos últimas excelentes campañas no garantizan nada: «No tengo sensaciones ni buenas ni malas sobre mi continuidad. Siempre he mirado por el bien del club y al final tanto ellos como yo haremos lo que creamos conveniente».