Zapatero ofrece su discurso ante el equipo nacional.Jenaro Díaz, detrás de Garbajosa y al lado de los hermanos Gasol, y el resto de miembros de la selección española se fotografían con SSMM los Reyes.

Jenaro Díaz, entrenador del PDV y ayudante de la selección nacional masculina absoluta, aterrizó la pasada madrugada en Eivissa con la medalla de oro del Eurobastet de Polonia al cuello. Antes, pasó el día en Madrid, donde recibió las felicitaciones del Rey Don Juan Carlos y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapateero. Y es que el preparador viene de saborear un nuevo triunfo de la mejor generación española de baloncesto de todos los tiempos. Ahora deberá cambiar el chip para afrontar su primera campaña al frente del subcampeón de la Copa de la Reina.

-¿Se siente exultante tras conseguir el oro?

-Sorprendentemente, no. Lo que te hace estar bien es el día a día. Somos un grupo, estamos todos muy a gusto y es un placer trabajar a este nivel más que el hecho de conseguir las cosas. Me quedo más con el camino que hemos llevado, pasándolo mal al principio, que con otra cosa, pues ante todo destaco esa fase de mantenernos unidos. Lo mejor fue el grupo, que es capaz de responder ante cualquier situación como la de Serbia en la primera fase. Tenemos muy claro que el camino lo hicimos juntos.

-¿Llegó a dudar del triunfo?

-Me preguntaron muchas veces esto y siempre digo lo mismo. Y es que la gente primero tiene que ver para creer, y yo siempre creo y creeré en este grupo.

-El mal arranque sorprendió a todos, pero aún más la manifiesta superioridad mostrada por España desde cuartos de final. ¿Cómo puede cambiar tanto un equipo de una noche a otra?

-Se han escuchado varios comentarios al respecto. Uno es que los equipos que comienzan bien el campeonato no suelen acabarlo igual, casos de Turquía, Francia y Eslovenia. El campeonato es largo y lo importante es crecer cada día. Nosotros fuimos paso a paso y cada vez nos fuimos encontrando mucho mejor. Otro comentario que se ha hecho es el del tema médico, ya que fuimos recuperando gente. Además, no hay que olvidar que hubo una fase de acoplamiento, porque faltaban dos piezas clave como Carlos Jiménez y José Manuel Calderón. El equipo se ha readaptado a otro estilo diferente, pero con la misma filosofía de defender fuerte y atacar rápido.

-España ha sido campeona del mundo, de Europa y subcampeona olímpica. ¿Qué aspiraciones hay ahora?

-Pienso que aquí el objetivo no es ganar de cualquier forma. No es el hecho de ganar lo que valora el grupo, sino la convivencia y los sentimientos que tienen los jugadores al juntarse. Claro que es importante ganar, pero para ellos es más importante recorrer el camino juntos. Retos aún hay varios por delante como, por ejemplo, revalidar el Mundial, que nadie lo hace, ganar a Estados Unidos, que es la otra potencia baloncestística, o incluso ganar los próximos Juegos Olímpicos.

-De sus palabras se desprende entonces que el hecho de haberlo ganado prácticamente todo no hará que algunos jugadores dejen la selección en un segundo plano.

-No lo harán, porque repito que no es tan importante el resultado final como el camino. El equipo se ha ido uniendo y no depende de ganar o perder. A esta gente le gusta ganar y competir, pero no dependen de un resultado para decidir venir o no venir. El grupo tiene un espíritu especial y sigue fuerte incluso sin dos piezas importantes, una de las cuales (Calderón) esperamos que vuelva pronto.

-¿Destacaría a alguien en concreto?

-El grupo es lo primero, pero me gustaría ser justo con una persona que ha evolucionado mucho: Pau Gasol, quien ha crecido no sólo como jugador, sino humanamente. Cada año va a más y es increíble. Cada año que pasa el trato humano con él es más cercano y adquiere un mayor liderazgo carismático del grupo. También hay que resaltar la madurez de Ricky Rubio para la edad que tiene o el espíritu que nos ha insuflado Raúl López y Àlex Mumbrú. Hay muchas cosas de cada uno que han ido aportando a la selección.

-Sin tiempo para saborear este nuevo éxito, ahora debe cambiar de chip y ponerse manos a la obra con el PDV.

-Ya tenía muchas ganas de llegar a Eivissa. Quiero intentar hacer poco a poco del PDV un equipo que divierta, con sentimiento de grupo y un buen baloncesto.

-La primera prueba, este fin de semana en el torneo Viajes Ibiza-Invisa Hoteles.

-No soy amigo de llamarlo prueba. La idea es que tenemos que ir creciendo y encajando las piezas del puzzle. Me parece bien jugar este torneo, pero mi intención es que sirva para que el lunes seamos mejor equipo que el viernes.

-¿Hasta dónde pretende llegar con el PDV?

-Hasta donde podamos todos. Intentaré ir sólo un paso por delante de las jugadores y del club para que puedan seguirme o bien al revés para que yo les siga a ellos. A veces tiro mucho de la cuerda metiendo conceptos tácticos y cosas así, pero puede ser que el club me pida una cosa y me tenga que esforzar yo. Lo que quiero es que vayamos casi a la par, tirando uno del otro para crecer y hacer de Eivisa un equipo con más solera si cabe.