Imagen de los jugadores que han defendido al Ibiza regional las últimas semanas.

El nuevo inversor de la UD Ibiza Emanuele Maffezzoni anunció ayer que ha realizado un traspaso por valor de 1.118.768 euros de la empresa que representa, Management Lele Corporation, a una cuenta con el nombre UD Ibiza de un banco, cuyo nombre prefirió no desvelar, para saldar la deuda del club.
Maffezzoni hizo hincapié en que ese traspaso «lleva la firma y el nombre del director del banco» y subrayó que la notaria de esa operación es María Eugenia Roa Nonide, miembro del Ilustre Colegio Balear. Asimismo, el empresario italiano aseguró en la tarde de ayer encontrarse en su despacho «esperando a los entrenadores» para abonarles en efectivo la deuda de 29.000 euros que mantiene el club con Sergio Tortosa, Daniel Ferrer y Alfredo Santaelena -este último a través de una transferencia bancaria-. Sin embargo, el preparador del Sant Jordi afirmó a última hora de la tarde no haber recibido noticia alguna en este sentido.
El interlocutor transalpino especificó que, mientras se encuentre trabajando o fuera de la isla, será Andoni Valencia, presidente de la comisión gestora del Ibiza, el encargado de llevar las operaciones para sanear la deuda del club.
Auditoría y regresos
El representante de Management Lele Corporation avisa también de que pretende llevar a cabo una auditoría fiscal para «ver la deuda total del club desde Pedro Ortega a Antonio Stina», para lo que ha contratado a tres abogados. En principio, el inversor quiere solicitar la auditoría mañana mismo, fecha en la que espera nuevas incorporaciones en la entidad.
Según informó Emanuele Maffezzoni, el club espera entre hoy y mañana la llegada de dos viejos conocidos de la parroquia rojilla. Se trata de Giussepe Materazzi, padre del central italiano y director deportivo del Ibiza en los primeros meses del mandato de Schipani y Stina, y del centrocampista asturiano Jonathan Ondina junto a su familia. El inversor afirma haber depositado en una cuenta del futbolista 30.000 euros en concepto de las mensualidades que le adeudaba el club.
Junto a él volverán el resto de jugadores que han ido abandonando el club de cara al primer partido de la fase de Preferente Regional, el próximo domingo frente al Luchador. El empresario italiano indica que todos los futbolistas tienen alojamiento, coche de alquiler y nómina y que comen en un restaurante de su propiedad.
El objetivo de la comisión gestora y de Maffezzoni es ahora realizar una auditoría para conocer el estado de las cuentas del club y convocar elecciones. En lo deportivo, Onofrio Barone podría contar esta misma semana con un bloque de garantías para iniciar la segunda fase y aspirar al ascenso a Tercera División.