El Portmany golpea primero

El Portmany no ha tardado en dar un golpe sobre la mesa en el estreno de la Regional Preferente. Los de Sant Antoni doblegaron por 1-3 a la Penya Esportiva Sant Jordi en una primer jornada en la que el Luchador superó (2-1) in extremis a una UD Ibiza plagada de juveniles.
En Sant Jordi, con un gran ambiente en las gradas que sirvió para recaudar 630 euros en favor de la familia de Adroà García, la primera parte destacó por el centrocampismo existente. Las primeras ocasiones las tuvo el conjunto local. Cucu, de falta, Puet y Salazar probaron fortuna, pero no acertaron a batir la portería del Portmany, que abrió el marcador a la media hora de juego gracias a un cabezazo de Toni Ramírez. La última gran ocasión de este primer acto la tuvo Pepe Ramón, pero se topó con el larguero.
Tras el descanso, el Portmany puso más tierra de por medio en un abrir y cerrar de ojos con un tanto de Samir. Luego llegó la polémica cuando Àngel despejó un balón con la mano fuera del área en el minuto 60. El árbitro no decretó nada. Cuando el partido agonizaba, Félix redujo distancias y dio algo de suspense al partido. En plena tromba ofensiva de los locales, Toni Ramírez sentenció el choque en el tiempo de prolongación.
Machete resuelve
En el otro partido de esta primera jornada, el Luchador se impuso a la UD Ibiza por 2-1. Los rojillos se presentaron en Sant Antoni con un plantel repleto de los juveniles de Liga Nacional, que no habían viajado a disputar el partido de dicha competición. Los de Can Misses salieron a morder desde el principio y no tardaron en poner a prueba al portero local. El Luchador se dedicó a defender con uñas y dientes, pero el acoso visitante encontró su recompensa al filo del descanso, cuando Lolo superó a Adri tras un buen servicio de José Rodríguez.
En la segunda mitad, el cuadro local se vio obligado a estirar sus líneas y Costa estableció las tablas en el minuto 59. El duelo entró en una fase de tensión, con expulsiones incluidas, y se resolvió en el último suspiro con un trallazo de Machete a falta de tres minutos para la conclusión.