Miguel Àngel Ortega, entrenador del Palacio de Congresos, en una imagen de archivo.

«Se puede decir que soy el entrenador que más rápido ha conseguido el ascenso», bromea Miguel Àngel Ortega, técnico del Palacio de Congresos de Ibiza. La noticia del regreso del equipo ibicenco a Liga Femenina tras permutar su plaza con el Real Canoe, confirmada este miércoles, ha sido «una pequeña sorpresa» para el técnico catalán, que reconoce que ahora hay que «cambiar todos los planteamientos y mirar sobre todo por el aspecto económico, porque ahora estamos en una competición diferente y la situación y, los objetivos, también son diferentes».

-¿Cómo le ha sentado la noticia de que el equipo jugará esta temporada en Liga Femenina?
-Ha sido una pequeña sorpresa. Espero que agradable. El quid de la cuestión, sin embargo, estará en el tema económico, porque el ascenso supone un esfuerzo importante para los directivos y el club. Pero no hay duda de que estar en la máxima categoría, entre los mejores, siempre es motivante.

-Cuando se negoció su fichaje lógicamente esa posibilidad estaba sobre la mesa...
-Pero no era consciente de eso cuando llegamos a un acuerdo. Siempre era rumorología, había comentarios, pero nada sólido. De hecho, me he tirado todo este tiempo, desde que estuve en Eivissa hasta hace al menos una semana, viendo todo el mercado de Liga Femenina 2 y jugadoras de esa categoría. Sin embargo, hace una semana, la posibilidad del ascenso empezó a madurar y tuvimos que cambiar todo el planteamiento. Es una Liga diferente, por lo que la situación y los objetivos son también diferentes.

-¿Va a haber muchos cambios en la planificación del equipo?
-Por supuesto. Por el momento contamos con Silvia Morales y Sandra Pirsic, que son jugadoras que nos van a ayudar mucho en Liga Femenina. Pero ahora hay muchas cosas que hacer y nombres que barajar. El esquema mental que teníamos hasta ahora era para Liga Femenina 2 y ahora la cosa ha cogido otra dimensión. Lo prioritario es ahora el capítulo económico, para ver hasta dónde podemos llegar, aunque teniendo en cuenta que es un año difícil no sólo para nosotros, sino para casi todos los equipos de la categoría.

-El club planteaba en Liga Femenina 2 un proyecto sin jugadoras americanas. ¿Eso sigue vigente en Liga Femenina?
-Va a depender mucho del mercado. No obstante, cuando hablamos de fichar, no miraremos si son americanas, españolas o comunitarias. Lo que buscamos son personas que colaboren con el club, buenas profesionales, con dedicación, responsabilidad y disciplina. Gente, en definitiva, que venga a trabajar. Dentro de ese perfil pueden entrar jugadoras de cualquier nacionalidad, ya sean americanas o no. No nos cerramos a nada.

-¿Quizá fue lo que faltó la pasada temporada, más implicación o espíritu de equipo?
-La verdad es que no estuve el año pasado en el equipo, por lo que no puedo opinar. Sin embargo, es un aspecto que a mí me preocupa mucho. No basta con hacer fichajes, hay que hacer un equipo. Para eso necesitas tener profesionales, en el amplio sentido de la palabra. A veces, la profesionalidad se da por supuesto y no siempre es así. Nosotros ahora estamos en una situación difícil, porque no es lo mismo ascender por méritos deportivos, porque ya vienes con un bloque definido y fuerte. El problema es que partimos casi de cero y hay que ver el nivel de cohesión que podemos conseguir. Por eso los fichajes hay que hacerlos con tranquilidad y sopesando muy bien las cosas.

-¿Cree que al final contará con un equipo capaz de lograr la permanencia, que es el gran objetivo de cara a la próxima temporada?
-Estoy totalmente convencido e ilusionado de que el Palacio de Congresos tendrá un equipo competitivo y que se podrá lograr mantener la categoría. Todavía tenemos tiempo y capacidad para formar un buen bloque. Tanto Víctor Torres, el director deportivo, como yo tenemos muy claro el perfil de las jugadoras que queremos y necesitamos y estamos mirando el mercado para encontrarlo. No se trata de contratar una serie de jugadoras y salir a jugar. Hay que intentar comprar también compromiso y espíritu de equipo.