El circuito de karts ubicado en las instalaciones de sa Coma fue testigo durante la jornada de ayer, como lo será en la mañana de hoy, de la segunda prueba del Campeonato de Balears, carrera que tiene el lujo de contar con la presencia del piloto de Fórmula 1 Jaime Alguersuari (Toro Rosso) y del ex piloto de rallyes Chus Puras, ocho veces campeón de España (años 1990 a 2002) y campeón del Mundo del grupo N (1994).
La visita de Alguersuari causó sensación entre las varias decenas de aficionados que disfrutaron de la vespertina jornada de entrenamientos del provincial de karts. Jaime, que había sacado a relucir su faceta de deejay la madrugada del viernes en la discoteca Amnesia, cumplió los deseos de organizadores y seguidores exhibiendo su dominio al volante de un modelo 125 de seis marchas. Durante los cinco minutos que rodó sobre el circuito, hubo tramos en los que alcanzó los 110 kilómetros por hora. Un auténtico prodigio sobre ruedas.
Y es que el jovencísimo piloto catalán -el 23 de marzo cumplió 20 años- dio sus primeros pasos en el automovilismo con tan solo ocho años. A los 15 ya era campeón de España de karting y subcampeón de la Copa del Mundo FIA Asia Pacífico. Durante la temporada siguiente, hizo sus primeros pinitos a bordo de un monoplaza y, desde 2006, entró a formar parte del programa 'Jóvenes Pilotos' de la escudería Red Bull Racing de Fórmula 1, que esta temporada le ha hecho debutar, a bordo de un Toro Rosso, en el Mundial más reconocido del automovilismo.
Encantado en la Isla
Con una habilidad especial para las relaciones sociales y un desparpajo impropio de un chico de sus edad, Jaime Alguersuari comentó sobre su estancia en Eivissa que «cada vez que vengo es un placer y un regalo para mí». El piloto barcelonés permanecerá en las Pitiüses varios días y, nuevamente aceptó la invitación de dos grandes amigos como Josep Roig y Vicente Bufí. «Los conozco de toda la vida y siempre que quieren entrenar con el karting y me preguntan nunca les digo que no. Es un placer compartir este afecto que tengo a la Isla con la ilusión de las carreras», explica.
Alguersuari, que visita la Isla desde que era pequeño, reconoce que «el karting que existe en Eivissa va evolucionando poco a poco». «Tenga o no circuito permanente es lo de menos porque sé que se ha trabajado mucho en esta dinámica y nunca se ha podido conseguir», lamenta.
De lo que es plenamente consciente el piloto de Fórmula 1 es de que «Eivissa es una cuna del motor». Otorga una gran importancia al trabajo que se realiza y destaca cómo «una roca tan pequeña ha dado tanta ilusión por el mundo del motor. Es fantástico».
Sobre la prueba puntuable para el Campeonato de Balears, comenta que «hace unos años no se podía imaginar que Eivissa lo albergara». Eso sí, reclama a las instituciones que «pongan la ilusión, la voluntad y que inviertan y promuevan el movimiento del deporte motorizado en Eivissa y Formentera».
Para el piloto, «Eivissa es un oasis». Siempre que puede, Alguersuari busca un hueco en su apretada agenda para hallar un remanso de paz, «un sitio para desconectar». Asegura que la Isla «da mucha tranquilidad», si bien subraya que, «paradójicamente no es así porque estoy con el kart, pero es importante estar con otra gente, con mis amigos y con otra filosofía».
Por último, confiesa que no sabe qué le deparará el futuro en la Fórmula 1. Lo que tiene claro es que «el presente está en Toro Rosso y el único secreto que hay es trabajar». «Mi objetivo es ser campeón del mundo, como cualquier otro piloto que empieza desde pequeño, pero queda mucho camino», concluye.